La Generalitat alerta de la falta de reservas estratégicas de gas natural

El Gobierno de la Generalitat ultima un plan para "superar la escasez de reservas estratégicas de gas natural", según la Dirección General de Energía del Departamento de Industria. La Generalitat tiene previsto utilizar un depósito subterráneo natural de gran volumen y establecer nuevas conexiones con la red europea de gas noruego y con el gasoducto Medgas, que lo importará de Argelia.

El Gobierno catalán está dispuesto a romper el cerco impuesto por el Ministerio de Economía y por Enagas, la empresa propietaria de las infraestructuras de transporte y almacenamiento, que actúa como operador técnico del sistema español del gas. Economía y Enagas parten de la base de que las infraestructuras proyectadas para los próximos años son suficientes, es decir, de que entre el gas importado por mar -el 60% del consumo catalán- y el importado a través del gasoducto del Magreb (el 40% restante) el suministro está asegurado.

Frente a esta versión, según la Generalitat habrá una diferencia de al menos el 10% entre el gas disponible y el que se consumirá en los próximos cinco años si no se mejoran las instalaciones. Esta diferencia se irá incrementando a medida que entren en funcionamiento los nuevos grupos previstos de generación eléctrica de ciclo combinado, es decir, centrales que utilizan el gas como energía primaria.

Tanto las empresas distribuidoras de gas como la propia Enagas preparan el abastecimiento de los próximos años a base de construir plantas de regasificación. En estas plantas se convierte en gas natural el gas licuado (CNL), que se transporta por mar en grandes cantidades. Enagas posee una de estas plantas en el puerto de Barcelona y Gas Natural tiene previsto gestionar varias plantas de este estilo, que ahora se encuentran en fase de construcción. "La Administración ha de pensar en el abastecimiento general del sistema del gas y no solamente en una red de mercado como, lógicamente, hacen las empresas", señala Albert Mitjà, director general de Energía. Para el Gobierno catalán, la clave del problema son las reservas estratégicas y para ello está estudiando la utilización como depósito de una cavidad subterránea de gran volumen en algún punto de Cataluña en el que se "han realizado anteriormente prospecciones petrolíferas", dice Mitjà. El Departamento de Industria destinará un millón de euros al estudio de la ubicación de este depósito natural.

La alerta de la Generalitat se suma a la lanzada por la Comisión Nacional de la Energía (CNE), que recientemente ha denunciado los efectos explosivos de una situación en la que confluyen el incremento anual de la demanda de gas, del 12%, y la saturación de las infraestructuras. La alerta de la CNE parte del antecedente de corte de suministro que se produjo el pasado mes de enero en plena ola de frío, cuando el consumo de energía alcanzó una cifra récord. En aquellas fechas, Enagas cortó el suministro a la central eléctrica de Sant Adrià de Besòs y, aunque no faltó gas en los hogares españoles -casi cinco millones de clientes particulares-, escaseó el que se utiliza para producir electricidad en las centrales.