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Fiat estrena presidencia y admite unas pérdidas récord de 4.263 millones

Umberto Agnelli, nuevo presidente, aprueba ampliar capital por 5.000 millones de euros

Fiat selló ayer el inicio de una nueva era, la de Umberto Agnelli, elegido nuevo presidente del grupo. El tercer Agnelli en un siglo toma las riendas de un grupo en profunda crisis que ayer reconoció pérdidas netas de 4.263 millones en 2002, casi seis veces más que el año anterior. El resultado operativo fue negativo en 762 millones de euros, en parte por la mala racha de Fiat Auto, que sumó 1.343 millones de pérdidas (frente a los 549 millones de 2001). El consejo decidió coger las crisis por los cuernos y anunció un aumento de capital de 5.000 millones para relanzar la rama de automóviles.

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La era del 'dottore' Umberto

El nuevo presidente de Fiat no perdió ayer el tiempo. En una breve entrevista televisiva reclamó "el apoyo del país para salir adelante", y aseguró que las ventas de activos son sólo "un paso atrás para dar mañana dos adelante". El dottore Agnelli contribuirá con toda la familia (que controla el 30% de Fiat) al aumento de capital, una parte sustancial del cual, 3.000 millones de euros, correrá por cuenta del grupo y, según el comunicado difundido por la casa del Lingotto "se ejecutará en los próximos 18 meses". El resto vendrá de la Bolsa y de la venta de firmas del holding.

La Bolsa de Milán acogió con evidente malestar la noticia del aumento de capital de Fiat Auto. Las acciones del grupo que habían obtenido el j

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