Representantes de Lleida, Girona, Figueres y Perpiñán estudian el impacto que tendrá la llegada del AVE
Técnicos y representantes políticos de los Ayuntamientos de Lleida, Figueres, Girona y Perpiñán se reunieron ayer en la sede del Colegio de Arquitectos de Lleida para analizar el impacto socioeconómico que tendrá la llegada del tren de alta velocidad (AVE) a estas ciudades de tamaño medio. El debate se centró en aspectos relacionados con el urbanismo, las infraestructuras y la evolución de la actividad económica y comercial.
El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Lleida, Lluís Torres, presidió la primera reunión de trabajo de un proyecto promovido por el consistorio de Figueres, titulado Evaluación del impacto socioeconómico del tren de alta velocidad, que tiene como objetivo crear una plataforma permanente de intercambio de experiencias y conocimientos entre estas ciudades de medianas dimensiones a fin de planificar y afrontar los profundos cambios que a buen seguro comportará la llegada de este tren. Figueres (Alt Empordà) será la ciudad más pequeña de Europa con estación de AVE. Su representante, Montse Palma, señaló que la plataforma está abierta a otras ciudades de similares características que vayan a recibir el tren de alta velocidad.
Este proyecto compartido por las cuatro ciudades, que ha sido presentado al programa europeo Interreg 2000-2006 para captar ayudas de los fondos Feder de la Unión Europea, pretende crear un observatorio de los impactos socioeconómicos de la alta velocidad y una base de datos comunes que permita prevenir con antelación los cambios y corregir de forma rigurosa los aspectos que puedan repercutir de forma negativa en la actividad comercial y en la movilidad de las personas.
Además de Torres, en la reunión participaron Montse Palma, concejal de Planificación y Actuaciones Concertadas del Ayuntamiento de Figueres; Isabel Salamaña, concejal de Movilidad y Coordinación Territorial del Ayuntamiento de Girona, y Michelle Fabra, concejal delegada del proyecto del TGV (la versión francesa del AVE) en el consistorio de Perpiñán.
Todos los asistentes a la reunión coincidieron en señalar que la experiencia de Lleida será muy enriquecedora para sus respectivos municipios. De hecho, la estación leridana será durante los próximos dos o tres años la única terminal del AVE en Cataluña. "Nosotros aún tenemos que comenzar y no sabemos muy bien con qué ventajas y problemas nos vamos a encontrar. A Lleida le tendremos que agradecer que haya ejercido de conejillo de Indias", señaló Isabel Salamaña.
Los representantes de los Ayuntamientos de Girona, Figueres y Perpiñán también visitaron las obras de la estación Lleida-Pirineus y comprobaron las transformaciones urbanísticas que se están produciendo en su entorno como consecuencia de la inminente llegada del tren de alta velocidad.
Precisamente mañana está previsto que Renfe inaugure la línea férrea de alta velocidad entre Lleida y Madrid con una serie de viajes de difusión y promoción -que se realizarán con trenes Alstom y Talgo, aunque no a las velocidades a las que funcionará cuando el servicio esté operativo- reservados a diferentes colectivos. El primer convoy lo ocuparán periodistas y la duración del viaje será de 3 horas y 50 minutos.
