La oposición y el PP tachan de electoralistas las promesas de Mas

La propuesta electoral lanzada el pasado lunes por el conseller en cap, Artur Mas, desde Montreal para que la Generalitat disponga de un departamento de Asuntos Exteriores y a favor de que Cataluña se convierta en provincia única tan sólo obtuvo ayer el lógico respaldo de Convergència i Unió. El resto de los partidos la tachó de electoralista y de brindis al sol, e incluso la izquierda acusó a Mas de "ignorar la ley" al proponer una sola diputación para Cataluña cuando las comunidades uniprovinciales -objetivo último de los nacionalistas- carecen de estos organismos, como sucede en Murcia o La Rioja.

Las críticas fueron unánimes y coincidentes. Los portavoces parlamentarios también lamentaron que Mas aproveche sus viajes oficiales para anunciar promesas electorales destinadas a su electorado y que, como resaltaron el portavoz socialista Joaquim Nadal y el republicano Josep Huguet, "hayan sido además ignoradas durante los 23 años de gobierno".

"Es un viaje y un acto de partido pagados por el Gobierno, en el que Mas busca el enfrentamiento con el PP que no encuentra en Cataluña pues aquí la alianza sigue siendo sólida", manifestó Nadal. Y Huguet señaló: "Es otra muestra del nacionalismo interruptus con que CiU nos tiene acostumbrados".

Por su parte, el presidente del PP catalán, Josep Piqué, declaró: "No me imagino a ningún país serio y democrático del mundo en el que la plataforma electoral sea una nueva Constitución, como aquí sucede con el Estatuto que defiende Artur Mas".