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Crítica:Signos
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Un recorrido tras las huellas de Gerald Brenan

Gerald Brenan (Sliema, Malta, 1894-Alhaurín el Grande, Málaga, 1987) es uno de los escritores extranjeros que mejor conoció España. Brenan se apasionó por un país que representaba el colmo del exotismo para un vástago de las clases altas británicas, frecuentador de los exquisitos y elitistas círculos de Bloomsbury y conocedor, por tanto, de las mil variantes de la hipocresía y la autorrepresión.

Una película y varios libros han devuelto protagonismo recientemente al autor de El laberinto español, Al sur de Granada y San Juan de la Cruz. El periodista Antonio Ramos Espejo (Alhama de Granada, 1943) ha aportado su punto de vista sobre el escritor británico con Crónica de Gerald Brenan.

CRÓNICA DE GERALD BRENAN

Antonio Ramos Espejo Centro And. del Libro, Málaga, 2002 540 páginas. 17 euros

Ramos Espejo ha dedicado gran parte de su vida a conocer mejor la figura de Brenan. "En aquel tardío invierno de 1975, los jóvenes periodistas andaluces que comenzábamos a conectar con las inquietudes de nuestro pueblo, tuvimos la fortuna de tener en nuestras manos Al sur de Granada, el nuevo libro del autor hasta entonces prohibido de El laberinto español y The Face of Spain, obras que sólo podían adquirirse en el mercado negro de la clandestinidad. Advertimos entonces que en Gerald Brenan teníamos un modelo a seguir", escribe Ramos Espejo.

Ramos Espejo dedica más de 400 páginas a seguir la andadura vital y profesional de Brenan. La llamada del Sur, La Alpujarra, Corresponsal de guerra, Luces para un laberinto, Primer investigador periodístico de la muerte de García Lorca, La huella de Góngora, San Juan de la Cruz y La verdadera faz de España se titulan los capítulos que integran este completo rastreo.

El autor ha buceado asimismo en algunos de los aspectos menos amables de la vida de Brenan, tales como su relación con una joven campesina de Yegen, con la que tuvo una hija. Brenan le quitó a su hija para darle a la niña una educación de señorita. La muchacha -una campesina con la que Brenan no se casó- lloró hasta hartarse al quedarse sin su hija, tal y como le contó a Ramos Espejo la hermana de la chica en una emotiva entrevista.

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