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ARCO 2003

Protestas, el arte como tortura, museo de picos y la robótica

Arco entró ayer en la primera jornada abierta al público, tras la inauguración oficial y las visitas profesionales. El público se dispersó por la oferta de las 277 galerías y utilizaron los distintos espacios abiertos (chill-outs) que en competición de diseños se extienden por los dos pabellones. Una parte de los visitantes tenían las pegatinas de "No a la guerra", sobre todo las rojas de Artistas Visuales Asociados de Madrid (AVAM) y otras versiones. Los artistas visuales repartieron 8.000 pegatinas en la tarde de la inauguración por los Reyes, además de octavillas sobre la manifestación de mañana, y hoy, a las 13.00, en el pabellón 9, el pintor Juan Genovés leerá un manifiesto.

La contestación también saltó en el espacio de la Generalitat Valenciana durante la celebración por la Encomienda de la Orden de Isabel la Católica que Consuelo Ciscar, subsecretaria de Promoción Cultural, había recibido horas antes en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Entre el vídeo de Bigas Luna, la tarta salada del arquitecto Vicente Guallart (Actar), el cava y numerosos invitados (Nuria Espert, Irene Papas, Francis Montesinos, José Vidal Beneyto, Francisco Jarauta), miembros de Ex-Amics del IVAM (www.e-valencia.org) repartían hojas con el título: "Cultura: mercancía, propaganda, turismo y espectáculo", con críticas a la Consellería de Cultura y Educación por la presencia en Arco, la bienal y el IVAM.

Desde la cárcel

Como contraste, al lado, el espacio del Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (MEIAC), construido sobre la antigua cárcel de Badajoz, presenta un proyecto de los críticos Quico Rivas y Rafael Zarza sobre el panóptico de Bentham y el digital (encarcelarte.com), la cárcel y las bellas artes de la época moderna. Entre las propuestas de diversos artistas figuran la de Pedro G. Romero, con la reconstrucción de una checa del SIM que funcionó en la iglesia de Vallmajor de Barcelona entre 1937 y 1939, con pinturas geométricas y abstractas como forma de tortura, fotografías de Bernardo Pérez y dibujos del preso político Isaías Díaz hechos en cárceles.

El Gobierno de Cantabria expone maquetas sobre el Museo de Cantabria, en Santander, con el proyecto que ganó el equipo de arquitectos de Mansilla y Tuñón. Con referencias a los Picos de Europa, proyectan doce estructuras como luminarias que formarán un conjunto de hormigón y placas de acero. En las imágenes virtuales, el cantante Bustamante aparece junto a Beuys.

Tres robots andan sueltos, pero se han identificado dos meninas robóticas, creadas por Ximo Lizana, en la entrada del pabellón 9, y un cristo de los cuatro brazos en la galería Punto. El artista dice que la robótica no está reñida con la tradición y plantea un rediseño de los iconos de la cultura.

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