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El BBVA ha pagado 390.000 euros por prejubilación en los dos últimos años

La retribución conjunta del consejo fueron de 18,3 millones en 2002

Íñigo de Barrón

El grupo BBVA se gastó un total de 1.306 millones de euros en las 3.326 jubilaciones anticipadas de los ejercicios 2001 y 2002. El coste medio de esta medida resulta de 390.000 euros, según la Memoria entregada ayer a la Comisión de Valores. El consejo, que se redujo en 16 miembros en 2002, recibió una retribución (incluida dotación de pensiones y dietas) de 18,3 millones, un 16% menos que 2001.

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Reducir plantilla tiene su coste. Y el BBVA, según los datos de la Memoria de 2002, se gastó 1.306 millones de euros en los dos últimos años (575,9 y 731,7, respectivamente) en las prejubilaciones de 1.439 y 1.887 empleados. El coste "incluye indemnizaciones, retribuciones diferidas y aportaciones futuras a fondos externos de pensiones". Es decir, una media de 390.000 euros (65 millones de pesetas).

Para la cobertura de estos cargos, la entidad constituyó provisiones contra la prima de emisión y reservas. Con cargo al ejercicio pasado, en la partida de quebrantos extraordinarios de la cuenta de pérdidas y ganancias, se anotan 76,7 millones de euros, que será sometido a la aprobación de la junta de accionistas, que se celebrará en Bilbao el 1 de marzo.

Para este año, la dirección de BBVA ha comunicado a los sindicatos que prevé realizar "más de 1.000 prejubilaciones" según informó la división de banca de CC OO. En términos económicos, el banco mantiene los baremos de retribuciones desde el 100% del salario en los empleados de 59 años o mayor edad hasta el 88% en los de hasta 53 años, siempre que su emolumento no supere los 27.000 euros. Para importes superiores, la paga será del 80% del salario.

Cuentas secretas

Durante el año pasado, el banco vivió la crisis ocasionada por las cuentas secretas de los paraísos fiscales. Esta situación se saldó con la reducción del consejo, que pasó de tener 32 miembros a sólo 16 en diciembre. En la Memoria se dedica un pequeño apartado a esta situción, en el que señala que la dirección del BBVA cree que esta crisis no tendrá "efectos significativos" para la entidad. El banco recuerda las investigaciones que actualmente lleva a cabo la Audiencia Nacional por las cuentas ocultas e indica que tampoco tendrá efectos negativos los expedientes tramitados por el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Esa reducción del consejo ha permitido bajar las retribuciones globales. En cualquier caso, durante 2002, coincidiendo con la caída de la Bolsa, el banco ya aplicó un nuevo esquema de pago consistente en incrementar las prestaciones fijas sobre las variables. Las remuneraciones fijas fueron de 4,6 millones frente a 1,7 millones de 2001 y las variables de dos millones sobre 7,5 millones en 2001. Por pensiones y otros conceptos, recibieron 11,73 millones.

El BBVA, que declara tener una autocartera de 0,337% del capital, también indica que en Argentina tiene clasificado como dudoso un total de 376,9 millones de euros. De esta cantidad, cuenta con una provisión de 103,4 millones en concepto de riesgo país y 71,94 millones como provisión.

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

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