El 90% de los prostíbulos de Barcelona no cumplen con la nueva ordenanza municipal
Cambios en la regulación de burdeles, bares, discotecas y consumo de alcohol en la calle
El 90% de los 130 locales de prostitución que hay en Barcelona -al menos- no cumplen los requisitos de la nueva Ordenanza Municipal de las Actividades y los Establecimientos de Concurrencia Pública que se aprobará inicialmente en el pleno del Ayuntamiento del jueves. Son las cifras que maneja la Asociación Nacional de Empresarios de Locales de Alterne (ANELA). La norma fija los requisitos que deben cumplir los prostíbulos, bares, discotecas, restaurantes, centros de culto y locutorios, entre otros, y regula también el consumo de alcohol en la calle, el fenómeno conocido como el botellón.
La nueva normativa prohibirá que los burdeles estén situados pared con pared con viviendas, en sótanos, a menos de 100 metros de distancia de escuelas, hospitales, organismos públicos o de otras actividades comerciales relacionadas con el sexo, y que ocupen más de 150 metros cuadrados en edificios habitados.
El responsable de ANELA en Cataluña, Manuel Nieto, explicó ayer que la mayoría de los 130 locales de alterne de los que tiene constancia la asociación en Barcelona deberán cerrar o adaptarse si la ordenanza se aprueba definitivamente en marzo como ha sido anunciado. La norma afectará tanto a los locales de nueva creación como a los ya existentes. Estos últimos dispondrán de un año para adaptarse. De no hacerlo, el Ayuntamiento les retirará la licencia, por lo que deberán cerrar o buscar una nueva ubicación. Además de regular el sector, esta nueva ordenanza servirá para realizar por primera vez un censo de estos locales, muchos de los cuales funcionan camuflados bajo otras licencias.
En opinión de Nieto, con la nueva ordenanza el colectivo se verá abocado a la clandestinidad. "La normativa es positiva porque por primera vez la prostitución va unida a un epígrafe, pero no es realista porque va a mandar a la calle a gente que ahora trabaja en estos locales", afirma.
La nueva ordenanza también regula los locales de ocio y restauración, aunque en este caso sólo afecta a los de nueva creación. Entre otras medidas prohíbe instalar nuevos bares o discotecas en sótanos o junto a viviendas. Respecto a la venta de bebidas alcohólicas, se prohíbe entre las 23.00 y las 8.00 en las gasolineras o comercios. En cuanto al consumo de alcohol en la calle, la ordenanza indica que su prohibición dependerá de "la apreciación por la autoridad" de las "molestias que puedan causar a los vecinos o peatones".
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