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Radio Euskadi cumple 20 años sin solución para el 30% de los trabajadores eventuales

La dirección no pasa a sus empleados a las productoras y tampoco se reúne con los sindicatos

Después de 20 años en antena, Radio Euskadi, oficialmente EITB Irratia (es decir, Radio Euskadi, Euskadi Irratia, Euskadi Gaztea, Radio Vitoria y Radio EITB) mantiene un porcentaje de un 30% de trabajadores eventuales, sin contar colaboradores, autónomos y becarios. Y no hay visos de solución del problema ya que las negociaciones laborales están bloqueadas por la negativa de la dirección de la empresa a hablar de la plantilla. El proyecto de futuro hasta 2005 se asienta en el apoyo del ente público vasco a las empresas privadas, pese a haber tenido en 2002 su mayor éxito de audiencia.

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Lo único que se conoce de momento es que, a principios de noviembre de 2002, la dirección de EITB presentó un contrato programa para la radio y televisión públicas vascas con escasas pero claras referencias al ámbito laboral, que propone limitar el crecimiento de la plantilla. Y reducir el porcentaje de gastos salariales. En resumen, el aniversario llega como un jarro de agua fría para los trabajadores de la radio pública que ven cómo el proyecto de futuro hasta 2005 pasa por el apoyo desde la dirección a las productoras privadas. Y eso que han tenido el mayor éxito de audiencia de su historia en 2002.

En esta línea se integra la propuesta de la dirección a los trabajadores que no mantienen una relación estable con EITB Irratia. Se les aseguraba la contratación durante tres años con una productora, con la promesa de que se mantendría el 100% del sueldo. La denuncia de los sindicatos de una presunta ilegalidad ha dejado esta propuesta aparcada de momento mientras la dirección trabaja en un respaldo legal a su iniciativa.

Los trabajadores afectados, conocedores de la dificultad de lograr un puesto fijo en la radio pública, se mantienen a la expectativa. "Aunque la versión que ha circulado ha sido negativa, lo cierto es que a la mayor parte de los afectados no nos desagradaba el acuerdo de trabajar con las productoras", comenta uno de los locutores que, por razones obvias, prefiere permanecer en el anonimato.

El grave problema que sufre Radio Euskadi es que la mayor parte de esos eventuales realizan trabajos de carácter estructural. Así lo denunció la parlamentaria socialista Isabel Celaá, como respuesta a la presentación triunfalista del programa-contrato. Y, para respaldar sus críticas, acudió a los acuerdos que la vicelehendakari Idoia Zenarruzabeitia ha firmado con los sindicatos a los que en principio ha de atenerse EITB Irratia. Estos acuerdos indican que son estructurales aquellos puestos de trabajo que se han cubierto al menos durante tres años, con la realización plena de las funciones.

Pero son malos momentos para hablar de relaciones laborales. Así lo confirman fuentes del comité de empresa, presidido por el sindicato nacionalista ELA. "La dirección nos ha defraudado una vez más. No negamos que el contrato-programa es uno de los más progresistas que se pueden encontrar en la actualidad en los medios de comunicación pública. Pero sólo en la teoría y en los contenidos. En cuestión laboral, teníamos unas expectativas completamente distintas de regularización de trabajadores temporales, becarios, autónomos, etcétera".

Lo cierto es que la fórmula mixta que vive EITB Irratia en alguna de sus cadenas es habitual en otras radios públicas. "Lo que es incomprensible es que los trabajadores no tengamos mecanismos de defensa frente a la dirección, como los consejos de redacción y comités de redacción", se queja el representante del comité de empresa. Estas formas de representación sí pueden encontrarse en medios de comunicación tanto públicos (BBC) como privados (EL PAÍS) de otras comunidades de España.

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