"Si tienen basura que la saquen y la demuestren", dice el consejero de Pesca

Si alguien se ha enfrentado a pecho descubierto a Xosé Cuiña en las últimas semanas ha sido el consejero de Pesca de la Xunta, Enrique López Veiga. Con la misma actitud con la que se presentó en la Costa da Morte desde el primer día de la marea negra, López Veiga acudió junto a Fraga y le planteó que si tenía pensado seguir contando con Cuiña, él no estaba dispuesto a seguir en el Gobierno. Muy elogiado por Mariano Rajoy durante la convención nacional del PP, este fin de semana, López Veiga se refirió ayer en Madrid a la posible actitud de Cuiña tras su destitución. "Todos somos señores, sabemos que algún día nos toca irnos y hay que saber marcharse como un señor. Espero que él lo piense así", declaró.

López Veiga se mostró convencido de que los partidarios de Cuiña "reflexionarán pronto" sobre una cuestión: "La gran mayoría de los votantes del PP respaldan al presidente y prácticamente todos los militantes populares están con don Manuel. Y todos sabemos que el presidente ha hecho lo que tenía que hacer, una remodelación de Gobierno como ha considerado que debía".

El detonante de la dimisión de Cuiña (la revelación de que una empresa de su familia vendió material para la limpieza de la costa) y las insinuaciones sobre Palmou que vertieron el sábado empresarios próximos al antiguo delfín han desatado el temor a una guerra de informes en el PP gallego. Pero López Veiga dice que no le preocupa que alguien sienta la tentación de sacar basura. "Pues que la saquen y la demuestren. Yo no tengo y no sé a qué basura se refieren", replicó el consejero.