El inspector arranca el motor, Smit Tak lo para

El inspector Serafín Díaz fue enviado el 14 de noviembre al barco para "poner en funcioniento las máquinas", según su propia declaración. Un día después, Smit Tak mandó parar el motor para no aumentar más los daños por las vibraciones. Mientras los técnicos de Smit Tak revisan y detallan todos los tanques dañados, Díaz hace su inspección "desde el helicóptero". Y cuenta: "Se veía un boquete largo en el costado de estribor de unos 15 metros aproximadamente, como si se hubiese desprendido una plancha".

Mientras el Gobierno aún creía viable a las 11.00 del día 15 hacer navegar más de 1.800 kilómetros al Prestige hasta el sur de Canarias, el barco empeoraba por minutos. A las 15.30 Smit Tak prevé ya que el " buque se parta en dos". A las 16.45, se evacua a todos los tripulantes y rescatadores por "razones de seguridad". Smit Tak prevé volver al día siguiente si "el barco resiste".