El Gobierno de México fija un plazo para poner fin a una guerra entre televisiones

Televisión Azteca y CNI Canal 40 deben llegar a un acuerdo en tres días y poner fin a una guerra de meses que se agudizó hasta llegar a la arena política mexicana y que está afectando al presidente Vicente Fox. Las autoridades amenazan con requisar Canal 40 -cuyas instalaciones fueron ocupadas en diciembre por TV Azteca- si no avanzan las negociaciones. Todo esto en medio de la batalla entre Raúl Salinas Pliego, propietario de Televisión Azteca (la segunda después de Televisa), y Javier Moreno, de Canal 40, cuyo origen es una malograda sociedad que terminó en enfrentamiento.

Cerca de la medianoche, Salinas Pliego y Moreno Valle llegaron a la Secretaría de Gobernación, discutieron hasta bien entrada la madrugada del lunes y posteriormente las autoridades informaron de que su primer acuerdo fue establecer un plazo máximo de tres días para alcanzar una solución.

Fox y su equipo de trabajo abordaron el asunto hasta el final de las vacaciones de fin de año, cuestión sobre la cual el analista Raymundo Riva Palacio comentó que se llegó a ese punto "porque hay un Estado de Derecho absolutamente insuficiente, que ha sido incapaz de resolver este conflicto mercantil por las vías legales. ¿Cómo es posible que se hayan podido dar tantas escaramuzas con laudos en que cada uno determina, lee lo que quiere y se niega a acatar lo que el otro dice que señala el laudo?". Se trata, en el fondo, dijo, de "un problema de leyes, que es el gran problema mexicano".

El asunto toca a Fox, agregó, por el "enorme vacío" de autoridad federal sobre este caso. "Hoy se cumplen 11 días y hasta este momento no sabemos, por parte de la autoridad, si efectivamente fue un comando armado [el que tomó las instalaciones de transmisión de CNI Canal 40], no conocemos investigación de autoridad federal", y esto es así porque "una cadena dice que hubo un comando armado y otra dice que no, y la autoridad federal dice que nos fuimos de vacaciones. Aquí el Estado mexicano se fue de vacaciones, es absolutamente absurdo".

La telenovela trágica, que hoy tiene a Canal 40 transmitiendo únicamente barras policromáticas, debe encontrar una salida rápida a la crisis, pero Televisión Azteca no parece dispuesta a renunciar a sus demandas, entre las cuales está el hacerse con la cadena independiente, en la cual invirtió 25 millones de dólares, que asegura no fueron cubiertos por Moreno Valle, cuando decidió unilateralmente echar abajo la sociedad.