Las pateras que salen del Sáhara prolongan su travesía hasta Tenerife y Gran Canaria
Localizadas el fin de semana cuatro lanchas que recorrieron entre 250 y 350 kilómetros
La Guardia Civil ha localizado este fin de semana cuatro pateras en las costas del sur de Gran Canaria y de Tenerife, en las que se supone que han arribado a ambas islas más de medio centenar de africanos indocumentados. El hecho de que las embarcaciones fueran de madera y similares a las que llegan a Lanzarote y Fuerteventura hace descartar, en principio, que procedan de un buque nodriza. Todo apunta a que los traficantes de personas están alargando sus rutas para evitar los controles instalados en las islas orientales.
Hasta ahora, las pateras que salían de El Aaiún, en el Sáhara Occidental, recorrían entre 100 y 150 kilómetros hasta alcanzar las playas de Fuerteventura y del sur de Lanzarote. La travesía que supuestamente ha realizado la lancha encontrada ayer en la zona de Montaña Pelada, en El Médano, a unos 70 kilómetros de Santa Cruz de Tenerife, habría sido de 350 kilómetros. Es la primera vez que llega a la isla una embarcación de estas características. En su interior los agentes hallaron una docena de pantalones aún mojados y varias latas de gasolina.
La Guardia Civil envió un helicóptero y una patrullera para rastrear el litoral en busca de posibles náufragos o buques nodriza, sin resultado. Hasta la tarde de ayer no había sido localizado a ninguno de los ocupantes de la chalupa.
Respecto a las pateras llegadas a Gran Canaria, la primera apareció abandonada en el muelle de Arinaga, una zona industrial del sur de la isla, donde agentes de la Guardia Civil detuvieron a un marroquí que aseguró haber partido el día anterior desde costas africanas con otras 11 personas, que permanecen en paradero desconocido.
Más al sur, pescadores de Arguineguin encontraron el sábado una embarcación de madera a la deriva, a unas dos millas del complejo turístico de Puerto Rico, informa Efe. Un africano que caminaba descalzo fue detenido y reconoció haber llegado en esta segunda patera, en la que dijo que viajaban otras nueve personas.
Ayer, un pescador que faenaba en la zona del Castillo del Romeral, al sur de Gran Canaria, alertó a la Guardia Civil sobre la presencia de otra patera que se acercaba a la isla. Cuando los agentes llegaron al lugar la encontraron abandonada en el lugar conocido como Tarajalillo. A pesar de que sus ocupantes se dispersaron nada más tocar tierra, la Guardia Civil logró detener a 10 de ellos, todos de nacionalidad marroquí.
Durante el fin de semana también ha continuado la llegada de embarcaciones a Fuerteventura y Lanzarote. En el primer caso, la Guardia Civil interceptó en alta mar una barca de madera con 15 personas, dos de ellas patrones y otras dos mujeres, a una milla de Tarajalejo, entre otros dos puntos de frecuente desembarco como son Las Playitas y Gran Tarajal. El sábado también fueron detenidos seis africanos que habían llegado el día anterior a Lanzarote con otras 15 personas, que fueron aprehendidas.
1.200 en Fuerteventura
Los inmigrantes indocumentados detenidos este fin de semana en Fuerteventura fueron conducidos a la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Puerto del Rosario, donde se les tomó declaración, y llevados luego a la antigua terminal del aeropuerto de la isla.En estas instalaciones, repetidamente denunciadas por Amnistía Internacional, Human Rights Watch y el Defensor del Pueblo, entre otros organismos, y en el viejo cuartel de la Legión de El Matorral, rehabilitado como centro de internamiento en mayo del año pasado, se concentran actualmente más de 1.200 personas, casi el cupo total de la comunidad autónoma de Canarias, según el pacto alcanzado el año pasado entre el Gobierno autónomo y el Ministerio del Interior.Esta situación desborda a Cruz Roja, que se encargan de la asistencia médica y humanitaria a los internos.
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