"En estas elecciones no voy a ser el candidato de gays y lesbianas"

José María Mendiluce, de 51 años, dice no creer en los partidos de "colectivos únicos". Por lo tanto, y después de declarar públicamente su homosexualidad en la revista Zero, el aspirante a la alcaldía de Madrid por el partido de Los Verdes asegura que no será "el candidato de los gays y lesbianas", lo será, afirma, "de todos aquellos que tienen un compromiso con la libertad".

Pregunta. ¿Qué rentabilidad política cree que va a sacar de su salida del armario?

Respuesta. Es algo que no me he planteado. Zero ha hecho entrevistas con diversos líderes políticos como Zapatero y Llamazares. Ahora me tocó a mí, y ante la pregunta directa, no pude negar mi homosexualidad.

P. Pero no se le escapa que tendrá alguna.

"Declararse homosexual no es fácil. Me parece más oportunista una foto con el chapapote"

R. No tengo ni idea de cómo va a afectar esto en los próximos días. Pero forma parte, simplemente, de un combate de mucha gente por las libertades. La conquista de los derechos de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales es una reivindicación en la campaña de Los Verdes en toda Europa. No podía escabullirme, por eso tomé la decisión de decirlo.

P. ¿No le parece un poco oportunista hacer esta revelación en plena precampaña electoral? Parece que fuera en busca del llamado voto rosa, que en Madrid es muy importante.

R. Lo que me sorprende es que esta declaración de mi homosexualidad se califique de oportunista cuando estamos viendo todos los días, y en todos los medios, ejercicios de oportunismo. Declararse homosexual en público no resulta facil. Me parece mucho más facil y oportunista hacerse una foto sacando chapapote en las playas de Galicia. Y que se cuestione, como se está haciendo, si esto me dará o no rédito electoral, me parece de una bajeza moral preocupante.

P. ¿Cuáles son sus propuestas dentro de su programa con respecto a los derechos de gays y lesbianas?

R. Vuelvo a lo mismo. A la consecución de las libertades. Y en este sentido nos acercamos a las reivindicaciones que desde hace mucho tiempo lleva hacien- do la Cogam [Coordinadora de Gays y Lesbianas de Madrid]. Se basan en dos pilares: la equiparación del matrimonio civil y la posibilidad de adoptar. Pero también hay que saber, por ejemplo, que el año que viene es el año de los discapacitados en Europa y que, también, hay que defender sus derechos. Pero más aún, defendemos que fumarse un canuto no sea un acto criminalizable. Apostamos por un Madrid libre para todo el mundo.

P. ¿Cuáles son las líneas maestras de ese cambio que usted quiere para Madrid?

R. Se articula en tres ejes principales. Uno libertario, en el que entraría la libertad sexual y todas las libertades; otro ecológico, con el que haríamos de Madrid una ciudad más habitable, y otro social, que no se diferencia mucho de las propuestas de otros partidos de la izquierda, aunque sí en las formas de conseguirlo.

P. ¿Cómo cree que analizará políticamente el electorado el hecho de que un eurodiputado por el PSOE se presente a la alcaldía de Madrid bajo las siglas de otro partido?

R. Yo no soy eurodiputado del PSOE. En su momento, tanto Felipe González como Joaquín Almunia creyeron que podrían enriquecer sus listas con otras personas. Yo me presenté por un partido que se llama PSOE-Progresistas y yo me enmarco dentro de esa segunda palabra. Además, detrás de mi nombre en esa lista, entre paréntesis, se escribe la palabra independiente. Tengo un compromiso con Los Verdes desde 1998, que expliqué en su momento al partido. Sigo en el Grupo Socialista. No soy ningún tránsfuga.

P. ¿Cuáles son las medidas que propone para hacer de Madrid una ciudad más ecológica?

R. Madrid tiene varios récords. El de ruido, el de falta de movilidad, el de unos niveles de contaminación altísimos. En las próximas dos semanas conluyo una ronda de contactos con expertos que analizan estos y otros problemas para tomar decisiones, para decidir cuáles son las prioridades. A mí también me gustan los tranvías... Pero esto se merece un paquete de medidas que es mucho más complejo que soltar cinco o seis propuestas. Y todo esto estará dentro de nuestro programa, que haremos público justamente cuatro meses antes de las elecciones. Me parece que todo esto está yendo demasiado deprisa en esta convocatoria electoral.

P. ¿Cómo analiza la acusación de Inés Sabanés, candidata a la alcaldía por Izquierda Unida, de que su salida del armario es "política espectáculo"?

R. A Sabanés he de decirle que sepa que el enemigo democrático en esta ocasión es Ruiz-Gallardón. Hacer política no es un ejercicio sublime de anonimato. Cuando se hace política y se comunica, normalmente es para decir algo, y esto no es otra cosa que un ladrillo más en la estrategia de la lucha por nuestros derechos.

P. Además, dijo que nunca había coincidido con usted en actos de defensa de los derechos de los homosexuales.

R. Es difícil coincidir cuando se está en Bosnia, en Angola o en Centroamérica. Pero desde que estoy en Madrid he acudido a las manifestaciones por el Día del Orgullo Gay. Pero es más, en mi vida nadie podrá haberme leído ni escuchado decir algo en contra de los gays y lesbianas. Siempre he defendido todas las libertades. Pero en mi vida hay muchos combates, la de la libertad sexual no es mi única causa.