Flexibilidad total en el Consejo de Ministros

Lo que faltaba ya por oír: pobres vecinos portugueses. Así, por obra y gracia de las más modernas tecnologías, el Gobierno español nos informa de que el petrolero Prestige ha dejado de ser un problema para España y es ahora asunto luso. Eso, en mi pueblo, es hacer que el vecino se coma el marrón. ¿Qué importa que más de 10.000 toneladas de fuel inunden las costas gallegas arruinando por diez años (?) costa y fauna marítima gallega? Lo mejor estaba por llegar con las declaraciones del ministro de Medio Ambiente "a tiempo parcial", Jaume Matas, tras siete días de silencio: "El problema es portugués".

Decididamente, hemos de reconocer que este Gobierno se aplica sus políticas. La liberalización total del mercado laboral ha sido total dentro del Gobierno y, por primera vez en España, hemos creado la figura del ministro con plena movilidad geográfica, funcional y a tiempo parcial, y todo a costa de todos nosotros, los ciudadanos contribuyentes.

Me explico: tenemos a dos ministros plenamente virtuales: Josep Piqué y Jaume Matas, nombrados candidatos, respectivamente, del PP a la presidencia de Cataluña y Baleares, que espero expliquen a los ciudadanos cómo compatibilizan ambas labores. ¿Ministro por la mañana, candidato por la tarde?; cuando hablan, ¿lo hacen como ministros o como candidatos? ¿Dan balance de su gestión o hacen promesas electorales? Creo que los ciudadanos merecemos un poquito más de respeto, y más en asuntos al menos que yo considero de vital importancia, como son el medio ambiente y la innovación tecnológica, que definen claramente a un país socialmente avanzado.

Y sigue la cosa: otro ejemplo es el denominado ministro de Administraciones Publicas y/o secretario general del PP, Javier Arenas, que creo que el hombre empieza ya a hacerse un lío cuando hace una comparecencia pública y tiene que mirar a su espalda para observar si está el logotipo del PP o el del ministerio. Es penoso este espectáculo en una democracia que muchos (aunque no dentro del Gobierno) considerábamos madura.

El problema dista de ser cómico y pasa a ser serio y preocupante. En beneficio de los ciudadanos y ciudadanas, estas personas deberían optar por una u otra función. ¿O es que consideran los cargos institucionales como un mero apéndice del aparato del PP? Ésta es la imagen que dan, penosa, pero no ya sólo para ellos, sino que con su irresponsabilidad perjudican al bienestar de todos.. Y ello, al final, nos lleva al principal responsable: el presidente del Gobierno (entre semana) y presidente del PP (fines de semana y fiestas de guardar), José María Aznar. Al final, sólo siguen el ejemplo de su líder. Pues eso, flexibilidad total. Zaplana, has ganado.