Representantes del mundo cultural y educativo suscriben un manifiesto contra la Ley de Calidad

Escritores, músicos, editores, colectivos culturales y sociales y diferentes miembros de la comunidad educativa (más de 2.000 hasta ahora, según los promotores) se adhieren al manifiesto presentado ayer en la Facultad de Filosofía de Valencia Una educació de qualitat per a totes i per a tots. El acto de presentación contó con la presencia de los máximos responsables de los diferentes colectivos que integran la Mesa Valenciana contra la Ley de Calidad, más conocida entre los promotores de la iniciativa como Ley Castillo, por la ministra impulsora de la misma.

Escritores como Vicente Muñoz Puelles, Manuel Talens, Lluís Messeguer, Jaume Pérez Muntaner, Gemma Lluch o Susana Fortes se han adherido al manifiesto Una educació de qualitat per a tots i per a totes, que exige un diagnóstico serio sobre los problemas de nuestro sistema educativo, plantea algunos principios que han de tenerse en cuenta para mejor solucionarlos, exige mayores inversiones en educación y pide el mayor consenso con las comunidades autónomas, partidos políticos, agentes sociales y comunidad educativa para abordar reformas. En conclusión, exige "la retirada" del proyecto de Ley de Calidad de la Educación y hace una "llamada a participar en las acciones que se realicen" en este sentido.

Al manifiesto, que fue presentado en público en un acto conducido por la periodista y actriz Reis Juan y en el que intervino el poeta Josep Piera con el Grup La Drova, se han sumado también músicos como Toni Torregrosa, Julio Bustamante o el conjunto Al Tall; artistas como Carmen Calvo, arquitectos como Juan José Estellés, editores como Josep Gregori o Rosa Serrano; asociaciones como Acció Cultural, Cedsala u otras de catedráticos o inspectores de educación, además de entidades como la Federación Valenciana de Empresas de Trabajo Asociado o los Movimientos de Renovación Pedagógica. También se adhirieron alumnos que superaron Secundaria gracias a los programas de diversificación curricular, que el proyecto de ley pone en el disparadero, y que ahora cursan estudios universitarios. En las primeras filas, los máximos responsables de las entidades que forman la Mesa Valenciana contra la Ley (sindicatos y partidos progresistas, Federación de Padres Gonzalo Anaya, entre otros). Entre el público, una profesora de Educación Infantil (considerada "el patito feo" de la ley), una madre de alumnos, una estudiante, un director de instituto y una directora de colegio de Primaria expusieron su experiencia y los riesgos que, a su juicio, entraña la ley. Cerró el acto la intervención del ex rector de la Universitat de València Ramón Lapiedra que abordó la situación de la educación en un sentido amplio y subrayó la necesidad de "un gran pacto de Estado para abordar el tema educativo", pero lo consideró inviable con el actual Partido Popular en el Gobierno.