Sólo uno de los cuatro sindicatos de la mesa de salud se desvincula del convenio
La fiesta de la firma no fue completa. El convenio por el que se regirá la sanidad andaluza en los próximos tres años -que los firmantes calificaron de "histórico" por las mejoras salariales y de tipo laboral que introduce- tuvo a última hora un sindicato disidente: Cemsatse, que rechazó firmar el acuerdo y se desvinculó de lo que en la reunión de la Mesa Sectorial de Salud del martes había rubricado y dado por bueno, según consta en el acta oficial de las negociaciones de ese día.
Cemsatse, surgido de la unión del Sindicato Médico Andaluz y de Satse (organización sindical de la enfermería), es el sindicato mayoritario entre médicos y enfermeras, con un 29% de representación entre los 80.000 trabajadores del SAS.
Las razones que sus dirigentes, Ángel González y Francisco Muñoz, dieron minutos antes de iniciarse el acto de la firma para ese cambio tan radical de actitud fueron dos: "En primer lugar estamos en desacuerdo con el modelo retributivo implantado; creemos que va demasiado dinero a conceptos de tipo variable y muy poco al fijo de la masa salarial. En segundo lugar, una vez más, el nuevo convenio no nos reconoce a médicos y enfermeros el peso específico que nosotros creemos tener en el contexto sanitario público", añadió González.
Al margen del citado desencuentro, el resto de sindicatos representados en la Mesa Sectorial de Sanidad (CC OO, UGT y CSIF), al igual que el SAS, se felicitaron del acuerdo alcanzado. Un acuerdo que Rafael Burgos, director de personal del SAS, resumió en los siguientes términos: "Hasta ahora el personal sanitario cobraba por estar y por ser. A partir del nuevo convenio todo el mundo va van a cobrar por lo que hace y cómo lo hace".
A partir del uno de enero de 2003, si los objetivos del nuevo convenio se cumplen, los funcionarios andaluces de la sanidad pública ya no serán los peor pagados del Estado, sino que estarán entre los primeros. La subida media para los médicos, en los próximos tres años, es de un 13%; un 15% para enfermería y un 10% para el resto del personal. De los 247,4 millones de euros de inyección económica que recibirá el sistema sanitario andaluz en los próximos tres años, 180 millones corresponden a incrementos en la masa salarial de los 80.000 trabajadores. Porcentualmente, un 45% de esta cantidad se librará el año que viene; un 30% en el 2004 y el 25% restante en el 2005. La subida media para todos los trabajadores se fija entre el 6 y el 8%, dependiendo de cada categoría profesional.
Un concepto importante del convenio rubricado ayer es el denominado "complemento de rendimiento", que viene a reconocer, con dinero, la acreditación profesional de cada trabajador. En función de la acreditación que consiga cada trabajador sanitario podrá cobrar más o menos. Si cumple unos objetivos determinados y sigue unas pautas aún por desarrollar, su salario se verá incrementado notablemente. Todo esto tendrá mucho que ver con valores como la aptitud, valía, promoción personal y la actitud laboral que se tenga.
Para los tres sindicatos firmantes, el nuevo convenio "es trascendental", no sólo para los profesionales porque van a ver recompensado económicamente su esfuerzo, también para los usuarios que "tendrán una mayor calidad asistencial", dijo María Ángeles Pino, de UGT.
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