¿Amnésicos, asustadizos o desleales?
Acabo de ver en los telediarios de la noche cómo se daba nueva sepultura -esta vez "cristiana"- a los restos de unos hombres que fueron asesinados en Valdecilla por el delito de ser "rojos" o, simplemente, no adictos a los vencedores.
Pocas veces se suele ver en este país entierros civiles, y ahora, en estos tiempos que corren, casi son un atrevimiento, un desfío a la derecha gobernante; pero lo que me ha llamado la atención -por expresarme en términos que ahora se llaman políticamente correctos- es que la sepultura "cristiana" no sólo consistiera en unos ataúdes con grandes crucifijos, sino con misas corpore re-insepulto.
He pensado, mientras el oficiante levantaba el hisopo y vertía el agua sobre las cajas que, probablemente, si esos restos hubieran podido reunirse y formar el cuerpo y el ánima de cada uno de aquellos que fueron y ahora así los reentierran, tal vez volverían a su actual estado para no seguir viendo cómo sus familiares y paisanos les hacen una ceremonia que seguro hubieran rechazado, en una iglesia y una religión que nunca fueron suyas, antes bien, fueron parte activa de sus muertes, de ser enterrados en fosas comunes, al lado de cualquier camino, sin que nunca los curas que ahora los bendicen movieran un solo dedo para conservar sus vidas. ¡Ahora sí que han sido enterrados y fusilados definitivamente! Olvidar, ¿para que la historia se repita?