El Gobierno catalán reconoce que el agua del Ródano es un 41% más cara que la del Ebro
Mas afirma que el proyecto será realidad cuando haya un Gobierno central en minoría
Trasvase del Ródano. Capítulo segundo: el Gobierno catalán aprueba un proyecto para enviarlo al Gobierno central. Lo anunció ayer el conseller en cap, Artur Mas. El titular de Medio Ambiente, Ramon Espadaler, aseguró que llevar a cabo lo previsto en el Plan Hidrológico Nacional sería nocivo para el Ebro; por ese motivo defienden, dijo, el trasvase del Ródano. Proyecto por proyecto, el del Ródano es más caro. El índice económico (no establece sólo el precio del agua) es de 44 céntimos por metro cúbico frente a los 31 céntimos del agua del Ebro. El 41% más.
El trasvase del Ebro previsto en el Plan Hidrológico Nacional es un desastre. Para empezar, acentúa el proceso de salinización del Ebro. En segundo lugar, no garantiza el suministro de agua porque habrá años en los que el caudal será tan mínimo que no se podrá utilizar el agua para el trasvase. El análisis de los últimos 21 años, explicó Espadaler, muestra que la garantía de suministro del trasvase del Ebro es sólo del 52%, lo que equivale a afirmar que sólo un año sí y otro no estará garantizada la posibilidad de utilizar el agua de este río. Un problema, aseguró el titular de Medio Ambiente, que no tiene el Ródano ni nunca lo tendrá.
Así las cosas, lo caro es barato y lo barato es caro. Es decir, los 31 céntimos de coste del agua del Ebro, calculados sobre los costes efectuados por el Gobierno central son ficticios. El índice económico es una fórmula que divide el coste de la obra por los metros cúbicos suministrados. La tesis del Gobierno catalán es que el Ebro no da para 1.050 hectómetros anuales (que es la cantidad votada en el Congreso, también por CiU). Por tanto, el coste es mucho mayor porque se hará una obra para trasvasar esa cantidad y se trasvasará apenas la mitad, luego el coste será el doble.
El índice económico del trasvase del Ródano es más caro. El metro cúbico sale a 44 céntimos, el 41% más que el agua del Ebro. Pero una vez más las apariencias engañan, porque ese precio es el real y, por tanto, argumentó Espadaler, el agua del Ródano, siendo más cara, es más barata.
El mayor coste del agua del Ródano es "asumible", dijo Espadaler, quien añadió que el trasvase previsto no es sólo para Barcelona y su área de influencia, sino para toda Cataluña. El acueducto empezaría en el Ródano y llegaría hasta Camp-redó, en las tierras del Ebro. Inicialmente, el Gobierno catalán consideró la posibilidad de trasvasar, como máximo, 300 hectómetros cúbicos, pero ayer anunció que su propuesta prevé el suministro de 473 hectómetros cúbicos, suficientes para abastecer a toda Cataluña, aunque sólo para usos domésticos e industriales. Esta opción permitirá reducir los 1.050 hectómetros cúbicos que el PHN preveía extraer el Ebro en un 45%, todos ellos hacia el sur de Cataluña. Con ello, la garantía de suministro pasa del 52% al 90% y, además, "elimina las tensiones interterritoriales", dijo.
CiU ya sabía todo esto cuando votó a favor del PHN; por eso forzó una enmienda que permite considerar otras posibilidades de trasvase. CiU quería que se hiciera mención explícita del Ródano, dijo Mas. No lo consiguió. Pero la ley incluye la posibilidad de efectuar propuestas. El Gobierno catalán remitirá la suya al Ejecutivo central. No está decidido si será por correo o irá el propio Mas a Madrid. Y si no se aprueba el trasvase, el proyecto será lo primero que pida CiU a un Gobierno que se halle en minoría.
"Ni oportunismo ni provocación"
Artur Mas cree que el trasvase del Ródano está en la "lógica y el esquema del plan hidrológico", por lo que el Gobierno central tiene "la obligación" de leerlo y tomarlo en consideración. Esto segundo no lo dice la ley, pero cae por su peso.La sesión en la que el conseller en cap da cuenta de los acuerdos del Consell Executiu sirvió para que Mas y Ramon Espadaler se repartieran los papeles. El primero se ocupó del discurso político y el segundo dio algunos datos técnicos que justifican el trasvase del Ródano.Mas quiso dejar claro desde el primer instante y sin que nadie le preguntara nada que la propuesta no es ni "oportunista" ni "una provocación contra nadie", y especialmente no es una provocación al Gobierno central, al que no se quiere "incomodar". Es, dijo, "una apuesta de futuro".El trasvase del Ródano, reiteró Mas insistiendo en que es el mismo discurso que mantiene desde 1995, tiene tres ventajas. La primera, que reduce a la mitad la cantidad de agua que trasvasar del Ebro; la segunda, que el Ródano es una garantía de suministro y el Ebro, en cambio, no; la tercera, que resuelve "para siempre" los déficit crónicos de agua que padece la Cataluña central.El trasvase del Ródano aplica al agua la misma tesis que a otros servicios: conectarlos en red. Así ocurre con el gas y con la electricidad; también están conectadas las carreteras y autopistas y se busca que lo estén los ferrocarriles, explicó, para terminar preguntándose "¿por qué no se va a hacer lo mismo con el agua?".
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