La denegación de becas, problema que más sufre el estudiante árabe

La denegación de becas, la falta de reconocimiento de los estudios realizados en sus países de origen y la carencia de sensibilidad hacia algunas de sus costumbres son los problemas que más sufren los estudiantes de países árabes en España

La denegación de becas, la falta de reconocimiento de los estudios realizados en sus países de origen y la carencia de sensibilidad hacia algunas de sus costumbres son los problemas que más sufren los estudiantes de países árabes en España, según explicó ayer Ignacio Jiménez Soto, el Defensor de Estudiante Árabe de la Fundación Euroárabe, una figura universitaria de ámbito estatal. Ignacio Jiménez, que ocupó su cargo hace dos semanas, indicó que los 12.000 estudiantes de origen árabe que cursan estudios en España (de los que cerca de 3.000 lo hacen en Granada) dejan en torno a unos beneficios anuales en el país de 86 millones de euros (unos 14.400 millones de pesetas).

'Tenemos que empezar a terminar con el estéreotipo de que todo inmigrante es ilegal, porque es un estéreotipo falso', afirmó Jiménez Soto, cuya primera medida, según explicó, es la de tomar contacto con los defensores universitarios de todas las Universidades españolas para tejer una red de contactos y conocer cuáles son los problemas de los estudiantes árabes en España.

Primeros casos

Los primeros casos ya han llegado al despacho de Jiménez Soto, un profesor de derecho administrativo de 44 años que durante ocho fue el defensor del estudiante en la Universidad de Granada. 'Se ha producido un conflicto que ha afectado a estudiantes marroquíes que estudian en Córdoba y Málaga', explicó. 'Pedían becas por pertenecer a familias numerosas. La Universidad de Córdoba decidió otorgar la beca después de que hablásemos con su defensora universitaria. La de Málaga, sin embargo, no'.

La razón de tal negativa, según explicó el defensor, es que la Universidad de Málaga no reconoce un escrito de la Embajada de Marruecos en Madrid que certifica que los peticionarios proceden de familias numerosas y exigen que sea el Gobierno de España el que expida ese certificado. 'Pero el Gobierno de España no puede hacer nada porque las familias viven en Marruecos, y es Marruecos el país que debe certificar ese extremo'. 'De mantenerse la negativa, tendremos que acudir al Defensor del Pueblo', agregó.

Jiménez Soto destacó a la Universidad de Granada como la más sensible y abierta hasta el momento a la hora de encarar los problemas de los estudiantes árabes, especialmente los magrebíes. 'Ha sido la primera en establecer en sus comedores universitarios un menú diferentes para los estudiantes musulmanes que no incluye carne de cerdo y también la que se negó a firmar los certificados de aprovechamiento que exigía el Gobierno para prorrogar la estancia de estudiantes magrebíes'. La oficina del defensor tendrá también como cometido defender los derechos de estudiaantes españoles que estén en universidades de países árabes.