Fallecen dos personas por un brote de gastroenteritis

Un brote de gastroenteritis en una residencia geriátrica de Barcelona es la causa más probable de la muerte de dos ancianos. En total, el brote ha afectado a 12 personas, una de ellas cuidadora del centro, según informó ayer el Ayuntamiento de Barcelona. Los fallecidos son un hombre de 66 años aquejado de Alzheimer y una mujer de 78 años. El Instituto Municipal de Salud Pública investiga las causas del brote.

El centro de atención primaria de la calle de Manso alertó el pasado lunes al Instituto Municipal de Salud Pública de la existencia de varios casos de personas afectadas de gastroenteritis procedentes de la residencia de ancianos San Patricio, situada en la Gran Via.

La investigación epidemológica ha identificado un total de 12 casos, uno de los cuales corresponde a una cuidadora del centro. Exceptuando a los dos ancianos fallecidos, sólo una persona ha permanecido ingresada, y el resto de los casos evolucionan favorablemente, según informó ayer el Ayuntamiento.

El primero de los casos que se detectó fue el del hombre de 66 años, que falleció el pasado día 21 en el hospital Clínico. Se trata de un enfermo de Alzheimer con antecedentes de hospitalizaciones. El anciano había iniciado un cuadro de diarreas después de haber estado ingresado en un hospital entre el 4 y el 12 de octubre.

El resto de casos se produjeron entre los días 19 y 23 y presentaban diarrea sin fiebre, siempre según el Ayuntamiento. De estos, dos personas fueron ingresadas también en el hospital Clínico y una de ellas, una anciana de 78 años, murió el pasado lunes.

El Instituto Municipal de Salud Pública ha realizado investigaciones epidemológicas y ha recogido muestras tanto de los ancianos como de los profesionales del centro para detectar el origen y las posibles causas del brote. El Ayuntamiento también ha inspeccionado la cocina del centro, que dispone de la licencia preceptiva, y no se han detectado deficiencias.

Según el Ayuntamiento, las primeras hipótesis 'no apuntan de forma clara a que la intoxicación sea de origen alimentario' y se baraja la posibilidad de que el brote se haya trasmitido de persona a persona a causa de un agente infeccioso que habría afectado a los ancianos por su frágil salud.

Por otra parte, 400 de las 1.242 personas que el pasado mes de junio resultaron intoxicados por salmonella después de consumir coca de Sant Joan de la pastelería Gusó de Torroella de Montgrí (Baix Empordà) han presentado denuncias contra los propietarios del establecimiento, según informó ayer el departamento de Sanidad.