Canelones al compás de un aria de Rossini

De primero, mortadela italiana. Como plato fuerte, canelones, y de postre, tarta Guillermo Tell (de manzana). Para chuparse los dedos. Éste fue el menú que degustaron ayer los alumnos del Colegio Francés de Bilbao dentro de una iniciativa conjunta de la asociación de padres y la dirección del centro que pretende sumar música y alimentación. La música corrió ayer a cargo de la soprano bilbaína Olatz Saitua, que se prestó gozosa a esta celebración culinaria acompañada por la pianista Mónica Resano.

En el centro del comedor del colegio un piano de cola esperaba a los alumnos y a las dos artistas. En una de las paredes, murales elaborados por los alumnos con el evento del día. Se eligió la figura del músico Gioachino Rossini para significar el día, ya que amó la gastronomía, además de ser un aceptable cocinero, casi tanto como la música. ¿Quién no conoce los canelones Rossini? También la tarta del menú lleva el nombre de una ópera del maestro italiano, estrenada en 1829. La mortadela era una de las debilidades del compositor para el aperitivo.

Con este menú como excusa, los alumnos del Colegio Francés han estado más de un mes trabajando el tema de Rossini y la alimentación. Son, en su mayoría, estudiantes de música, tanto en el centro como fuera del mismo, de 10 a 16 años.

Olatz Saitua interpretó el aria de Susanna de Las bodas de Fígaro, un dueto de Don Giovanni y el aria de Rosinna de El barbero de Sevilla. Para el dueto contó con la colaboración del coro del colegio, que también interpretó sin la soprano Gaudeamus Hodie. Había emoción contenida y en los ojos de los niños, mucha admiración. Mientras Saitua cantaba, no se movía ni un tenedor. La comida se quedaba fría en los platos.

Para la soprano, la iniciativa es 'excelente, una manera muy entretenida de acercar a los niños la música de forma que no les aburra'. Ella confiesa que en su casa es habitual cantar en las comidas, por ello el escenario le pareció 'natural'.

En las próximas jornadas gastronómicas, el Colegio Francés contará con dos deportistas, Joane Somarriba y Edurne Pasaban, que explicarán a los estudiantes cómo se come encima de una bicicleta y a 8.000 metros de altura, respectivamente.