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Naciones Unidas confirma que la empresa Oryx fue cómplice del Gobierno de Zimbabue

El informe de Naciones Unidas corrobora con todo lujo de detalles los resultados de una larga investigación publicada en EL PAÍS hace dos semanas, que señala a la empresa Oryx Natural Resources (ONR) como uno de los principales cómplices del Gobierno de Zimbabue en las actividades criminales que se han llevado a cabo en Congo. 'La comisión ha obtenido pruebas documentales de que la empresa del señor Al Shanfari, Oryx Natural Resources, está siendo utilizada como tapadera para el Ejército de Zimbabue y su empresa militar OSLEG', dice el informe de la ONU, que recomienda que Oryx y su presidente, Thamer al Shanfari, sean sometidos a severas sanciones financieras.

Las acusaciones que publicó EL PAÍS fueron, en resumen, que Oryx realizó pagos en efectivo a altos funcionarios del Gobierno de Zimbabue, que traficó con diamantes ilegales o de guerra en la República Democrática de Congo y que participó en el tráfico ilegal de divisas en este país y Zimbabue. En declaraciones publicadas junto al artículo de EL PAÍS, el número dos de Oryx, Geoffrey White, afirmó que las acusaciones eran 'estupideces... completamente falsas' y que, al contrario, la empresa 'se enorgullece de tener un comportamiento íntegro y honrado'. En una carta enviada posteriormente, el abogado de Oryx en Londres, Mischon de Reya, dijo que las acusaciones contra su cliente eran 'una terrible difamación'.

Posteriormente, EL PAÍS publicó una rectificación que envió Oryx, en la que la empresa aseguraba, primero, que 'ni ONR, ni sus administradores han estado,ni ahora ni nunca, involucrados en el tráfico ilegal de divisas a Zimbabue'. El informe de la ONU dice que Oryx operó como 'una tapadera para transacciones de divisas extranjeras, utilizando varias rutas de entrada y salida de la República Democrática de Congo. La mayoría de estas últimas (operaciones) incumplían las leyes nacionales de intercambio de divisas y generaban beneficios del arbitraje entre los distintos tipos de cambio del dólar de EE UU y el franco congolés vigentes en Kinshasa y en el este de la República Democrática de Congo, respectivamente. El informe repite la alegación hecha en EL PAÍS de que empleados de Oryx transportaban con frecuencia en vuelos entre Londres y Harare paquetes conteniendo medio millón de dólares.

En segundo lugar, la rectificación de Oryx decía que la empresa 'no ha efectuado donaciones en efectivo (ni de otro tipo) a Mugabe, ni al partido político Zanu PF, Grace Mugabe, Emmerson Mnangagwa, Vitalis Zvinavashe o Sidney Sekeremayi'. El informe de la ONU cita a empleados de Oryx que dijeron haber pagado 'comisiones' ilegales a Mnangagawa. El informe también menciona una carta citada por EL PAÍS en la que el ministro de Defensa, Sekeremayi, agradece a Al Shanfari 'su apoyo material y moral durante las elecciones parlamentarias de 2000'. 'Tales contribuciones', afirma la ONU, 'violan la ley de Zimbabue'.

Tercero, Oryx negó a EL PAÍS haber traficado en 'diamantes de conflicto'. El informe de la ONU dice que, corroborando otra información detallada publicada en este diario, Al Shanfari había dado órdenes a su jefe de seguridad de transportar diamantes de contrabando del Congo a Suráfrica.

Tal y como reveló EL PAÍS hace dos semanas, la ONU señala a Emmerson Mnangagwa, el confidente más cercano del presidente Robert Mugabe y amigo y socio de Al Shanfari, como 'el estratega clave' en 'la red de élite' que operaba de manera ilegal con empresas privadas como Oryx en la extracción de diamantes de Congo.

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