Forner reconoce problemas para pagar retribuciones docentes

Tras mantener el lunes pasado una reunión con el equipo directivo de la Universidad de Valencia, el director general de Universidades, Salvador Forner, reconoció ayer que el modelo de financiación vigente desde 1999 ha podido suponer 'un trato desigual' para la Universidad de Valencia. Forner hizo declaraciones en este sentido al referirse al nuevo decreto aprobado ayer por el Consell que, entre otras cosas, permite la asignación de retribuciones adicionales para el profesorado de las universidades públicas, en concepto de méritos docentes, de investigación y de gestión. Según los cálculos efectuados por la Universidad de Valencia, el pago de estas retribuciones adicionales a su plantilla podría suponer un 'sobrecoste' cifrado entre los 3,5 y 4,2 millones de euros anuales, con datos de 2002.

Ayer, Forner defendió que 'mientras se mantenga el modelo actual de financiación', las 'reglas del juego están claras', en el sentido de que no hay una partida específica para pagar retribuciones adicionales. Pero también aceptó que alguna universidad, y en especial la Universidad de Valencia, 'puede tener más problemas para pagar estas retribuciones', puesto que 'la aplicación práctica del actual modelo, basado en criterios objetivos, ha tenido un trato desigual para esta universidad'. La parte más sustanciosa de las retribuciones adicionales va dirigida a los profesores funcionarios y la Universidad de Valencia tiene en torno a un 70% de profesores funcionarios. Compárese con las de Alicante o la Jaume I, donde el porcentaje ronda el 50%. Además, al ser la plantilla más antigua, los méritos en virtud de los cuales se asignan los nuevos complementos retributivos, son previsiblemente de mayor cuantía que en otras universidades.

Financiación

El director general de Enseñanzas Universitarias sugirió la posibilidad de contemplar el gasto extra de estas retribuciones, 'a posteriori', una vez abonadas por la universidad, con lo cual, dijo, 'estaríamos en 2004 y ya con un nuevo plan de financiación que puede incluir el nuevo componente retributivo'. El rector de la Universidad de Valencia, Francisco Tomás, recordó que ese pago 'está fuera' de sus 'posibilidades económicas con el actual marco financiero'. Tomás, destacó, asimismo, que el Plan de Financiación 1999-2003 abre una vía de asignación presupuestaria por 'costes derivados de la aplicación de normativa estatal o autonómica', como posible fórmula de salida de la actual situación que permitiría incluir el coste de las 'retribuciones adicionales' en los presupuestos de 2003, sin salirse del plan de financiación vigente.

El nuevo decreto sobre el personal docente dice que las universidades públicas 'podrán acordar implantar' las llamadas retribuciones adicionales, no que estén obligadas a hacerlo. Pero diversas fuentes coinciden en señalar que una universidad que se descuelgue de ese tipo de ofertas para el profesorado, propicia un agravio comparativo y pierde atractivo para el profesorado más competitivo.