Toda la izquierda política acude a la concentración

La izquierda política dio ayer su respaldo a la manifestación de la Puerta de Alcalá para reclamar la rectificación del decretazo, con la presencia de las direcciones en pleno del PSOE y de Izquierda Unida (IU). Junto al secretario general socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, acudieron José Blanco, Alfonso Guerra, Joaquín Almunia, Alfredo Pérez Rubalcaba, Jesús Caldera, Jordi Sevilla y Cristina Narbona, entre muchos otros.

Un apoyo que también dieron Joan Saura, dirigente de Iniciativa per Catalunya-Verds; José María Mendiluce, candidato a la alcaldía de Madrid por Los Verdes; Pedro Pacheco, alcalde de Jerez, y los ex secretarios generales de UGT y CC OO, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez.

Rodríguez Zapatero cree que esta protesta demuestra que 'el Gobierno estaba equivocado y los trabajadores tienen razón'. El dirigente socialista recomendó al Ejecutivo de José María Aznar 'que rectifique. Ahora tiene la oportunidad de corregir el grave error que cometió aprobando el decretazo'. Y confía en que el Gobierno modifique en profundidad la norma.

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, que acudió junto a Francisco Frutos, Antero Ruiz, Felipe Alcaraz y el resto de dirigentes de la coalición, cree que 'el único camino que tiene el Gobierno es rebobinar y escuchar lo que dicen los trabajadores y los sindicatos'.

A su vez, los líderes de UGT y CC OO, Cándido Méndez y José María Fidalgo, lanzaron un mensaje a los partidos de izquierda para que no lo olviden cuando elaboren sus programas electorales y, sobre todo, cuando lleguen al Gobierno. 'Que modifiquen todas las medidas que no hayamos conseguido cambiar los sindicatos con el PP', afirmaron con palabras similares los dos sindicalistas.

Respeto de Zaplana

El ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, expresó, en declaraciones a TVE, su respeto por los manifestantes y, aunque dijo que 'lo fácil sería decir a todo el mundo que sí', insistió en señalar que el proyecto de ley derivado del decreto es 'una buena reforma' que da resultados.

De cara a la reunión que tiene convocada para mañana lunes con los secretarios generales de UGT y CC OO, el ministro de Trabajo reiteró que, en cualquier caso, el Gobierno del Partido Popular ha decidido 'mover ficha' y que hará 'todos los esfuerzos de flexibilidad a su alcance' para acercar posturas con los sindicatos, pero 'sin desnaturalizar' el sentido de la reforma.

Aunque desconoce si será posible el acuerdo, el ministro insistió en la conveniencia de recuperar un clima de diálogo y unas relaciones fluidas para afrontar otros temas importantes con el objetivo del pleno empleo. 'Pido a los sindicatos el mismo esfuerzo de flexibilidad, y confío que lo harán. Espero que nuestra oferta sea acogida con receptividad', afirmó.