Llamazares busca el consenso en IU con un texto que critica al PNV por 'electoralista'

Los dos grupos abiertamente enfrentados en IU por la postura de la coalición en el País Vasco buscan en estos días una estrategia común. Ante la complicada reunión del domingo, a la que la coalición llega dividida, ambos grupos negocian una posición común que se distancie de la dinámica soberanista emprendida por el lehendakari, Juan José Ibarretxe.

Gaspar Llamazares, líder de uno de estos dos grupos y coordinador general de la coalición, ha endurecido las críticas y el distanciamiento del PNV en el texto que presentará el domingo. Su intención es que el sector que dirige Francisco Frutos, secretario general del PCE, asuma esta postura. De lo contrario, Llamazares se arriesga a perder la votación, puesto que la exigua mayoría que le aupó a la coordinación general podría trastocarse con un asunto tan polémico como éste.

La situación se viene repitiendo desde hace unos meses, aunque se agrava por momentos. Cada propuesta rupturista del Ejecutivo vasco es secundada por la federación que dirige Javier Madrazo y luego criticada por la dirección federal. La distancia llega a tal nivel que Madrazo no ha asistido siquiera a las dos últimas reuniones, aunque en su entorno se asegura que sí acudirá a la cita del domingo.

Ahora que se acerca el periodo electoral, y visto que las encuestas no son nada positivas, varios dirigentes, especialmente de la federación de Andalucía, piden que Llamazares se distancie más claramente de Madrazo. Están convencidos de que cualquier disputa con el coordinador vasco refuerza a la coalición en el resto de España.

Perder la votación

Llamazares ganó por muy poco la votación del lunes, previa a la del domingo. Ante la posibilidad de perder esta vez, el coordinador ha endurecido algunos términos del texto. Dice, por ejemplo, que la última propuesta del lehendakari, que la federación vasca apoya sin fisuras, 'tiene sesgo nacionalista' y 'un claro horizonte electoral en la convicción de que ese discurso conseguirá un refrendo mayoritario que le permitirá negociar en mejores condiciones con el Estado'. Sin embargo, y dentro de la ambigüedad que caracteriza este tipo de textos de IU sobre el País Vasco, también destaca aspectos positivos de la propuesta de Ibarretxe, a los que identifica como 'importantes compromisos de EB-IU, como la idea del federalismo de libre adhesión'.

Los distintos sectores de la coalición van a seguir negociando. Pero las elecciones municipales están a la vista, y la presión a la que van a someter los críticos al coordinador general es muy fuerte. La idea asumida es que mientras se siga viendo a IU asociada a la deriva soberanista del PNV, la sangría de votos no parará. Dado que es imposible abandonar el Gobierno de Ibarretxe porque esa decisión compete a Madrazo, los críticos proponen desvincularse del discurso de la federación vasca.