Urbanismo autoriza un gran comercio en el solar del edificio derrumbado hace un año en Argüelles

El pleno municipal aprobó el pasado jueves, sólo con los votos del PP, un plan especial que permite la demolición de un inmueble que tiene protección ambiental sito en el número 58 de la calle de Princesa, esquina a la de Alberto Aguilera, en el barrio de Argüelles. En ese lugar se construirá, como sede de una conocida firma de ropa, un moderno edificio que abarcará la manzana completa, incluido el solar del inmueble que se derrumbó hace poco más de un año en la calle de Gaztambide. En el siniestro, ocurrido mientras se realizaban unas obras, murió un mendigo.

El derrumbe de la calle de Gaztambide, ocurrido el 7 de marzo de 2001, fue el primero de una serie de siniestros que causaron alarma social y pusieron de manifiesto la desidia y el abandono en que se encuentra gran parte de los edificios de la almendra central de Madrid. Un mendigo que se encontraba junto al inmueble falleció sepultado por los cascotes y otras 11 personas resultaron heridas. En el inmueble, incluido en el Catálogo de Elementos Protegidos por sus características arquitéctónicas, se estaban realizando en la planta baja obras para un establecimeitno de la firma Du Pareil Au Meme, especializada en ropa infantil.

Los grupos de la oposición (IU y PSOE), responsabilizaron de esa situación a la gestión del gobierno municipal, del PP, que ha permitido la realización de obras sin licencia y el derribo de inmuebles que tienen algún grado de protección urbanística. Esa situación se da, de nuevo, en el plan especial que el titular de Urbanismo, Ignacio del Río, llevó al pleno municipal, celebrado el pasado jueves. La propuesta salió adelante sólo con el apoyo del grupo popular y el voto en contra de IU y PSOE. El plan no sólo da luz verde al derribo de un edificio protegido, sino que además modifica el Plan General de Ordenación Urbana para que la manzana comprendida entre las calles de Gaztambide, Alberto Aguilera y Princesa se destine a un uso diferente al característico de la zona residencial. En lugar de viviendas, Urbanismo autoriza la construcción de un moderno edificio, de cinco plantas de altura y de fachada acristalada, destinado exclusivamente a uso comercial. En él se instalara, justo enfrente de El Corte Inglés, la firma Zara.

El expediente elaborado por la Gerencia Municipal de Urbanismo especifica que la parcela donde se levantará el inmueble 'se ubica en el conjunto histórico de la Villa de Madrid'. Los técnicos de Urbanismo señalan asimismo que el inmueble actualmente existente en el número 58 de la calle de Princesa 'está incluido en el catálogo de Elementos Protegidos con nivel 3, grado ambiental, que protege los valores de la fachada'. Aun así, los técnicos de Urbanismo matizan que ese grado de protección 'no precisa necesariamente el mantenimeinto físico de la misma'.

Fotografías

El expediente del plan especial, presentado por Zara el 24 de julio de 2001, cinco meses después del derrumbe de la calle de Gaztambide, no especifica el volumen de edificabilidad que tendrá la nueva construcción, pero incluye planos del inmueble que abarca toda la manzana, así como fotografías de las labores de desescombro realizadas tras el desplome.

'El resultado de la política urbanísitica de Ignacio del Río es que, en Madrid, cualquier propietario que tiene un edificio en una buena zona, lo tira o deja que se caiga y sabe que, al final vende el solar y se forra', afirma Alfredo Marchand, portavoz socialista en Chamberí.

'Lo más grave es que en el derrumbe de Gaztambide hubo víctimas y habría que tener un cuidado especial con estas cosas. Al final hay alguien que ve fruto en la desgracia ajena y eso tiene que ver con la desidia urbanística del PP. Es la segunda vez en el distrito de Chamberí que, después de un derrumbe con resultado de muerte, aparece un claro beneficio para una empresa. Cuando se cayó la marquesina del cine Bilbao, apareció El Corte Inglés y, ahora, en Gaztambide, aparece Zara, cuyo dueño es el hombre más rico de España', concluye Marchand.

Según Marchand, el nuevo edificio comercial tendrá un impacto visual 'brutal' en uno de las barrios más característicos. Este edil socialista considera asimismo que se plantearán problemas de movilidad en una zona permanentemente saturada de tráfico. Desde IU, Justo Calcerrada, portavoz de Urbanismo, califica el plan espacial de 'escándalo'. 'Es una muestra del nulo respeto del PP por un asunto que causó alarma social en todo el país', concluye.