El Defensor andaluz denuncia coacciones policiales a inmigrantes en El Ejido y Níjar

El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, denunció ayer en Almería la 'persecución' que colectivos de inmigrantes marroquíes y ecuatorianos padecen de manos de 'algunos' miembros de la Guardia Civil y 'sobre todo' de la Policía Local de El Ejido y Campohermoso (Níjar) y también del Cuerpo Nacional de Policía. El Defensor del Pueblo Andaluz, que anunció que contrastará su información antes de presentar la denuncia en la Subdelegación del Gobierno, advirtió de que la presión sufrida en los últimos meses por un grupo de 22 extranjeros podría conducir a 'situaciones del pasado'. La Subdelegación del Gobierno en Almería emitirá joy un comunicado de réplica a las críticas de Chamizo.

La denuncia realizada por José Chamizo describe una suerte de persecución 'de algún policía local y algún policía nacional que van actuando por su cuenta', dijo. En este incumplimiento de la ley por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado dio mayor protagonismo a los policía locales 'y algún pequeño grupo de la Policía Nacional'. 'Me queda contrastar con cinco o seis personas. Pero 22 personas han tenido persecución policial en la que algunos policías no han respetado el procedimiento legal vigente. Se habla también de permisividad más grande para inmigrantes del Este', apuntó el Defensor del Pueblo andaluz. Entre los 'hechos extraños' que llevan produciéndose desde hace tres o cuatro meses, Chamizo denunció las visitas a cortijadas por parte de algunas fuerzas del Estado. 'Los agentes van a los cortijos y todo aquel que no tenga documentación es desplazado al cuartel y se le abre un expediente de expulsión', explicó el Defensor, que informó también de que algunos casos de inmigrantes detenidos no contaron con asistencia jurídica pese a que la policía hubiese hecho la llamada pertinente. 'Puede que alguien me corrija, pero no puedo ser cómplice con el silencio', justificó el Defensor del Pueblo.

Chamizo solicitó al Colegio de Abogados de Almería que 'cuando [un letrado] intervenga en un expediente de expulsión, comparezca después cuando sea requerido', y añadió que en algunas ocasiones 'no ha sido así'.

Chamizo completó ayer la visita iniciada el martes pasado a Almería para tomar un primer contacto con la situación. El objetivo de su viaje era estudiar con más detalle las presiones denunciadas por los inmigrantes, saber si son hechos puntuales o, por el contrario, una situación generalizada. Después de anunciar que dará cuenta, en primer lugar, a las autoridades, apeló a que sea la sociedad, en segunda instancia, quien tome nota de los hechos. 'Si hay delitos, que lo denuncien. Ya es hora de que agudicemos el sentido común', sentenció.

Hanafi Hamza, presidente provincial de la Asociación de Trabajadores Inmigrantes Marroquíes (Atime), suscribió las denuncias de Chamizo y aseguró que la persecución policial se realiza 'tanto en inmigrantes indocumentados como regularizados'. 'Existe una presión de las autoridades que se esconden detrás de la Seguridad Ciudadana y meten a todos en el mismo saco, con lo que no sólo persiguen a los malhechores sino que acosan a gente trabajadora', explicó Hamza.

Carné de conducir

El presidente de Atime distinguió 'diferentes' modos de actuación por parte de la Guardia Civil y de la Policía Local a la hora de llevar el seguimiento a los extranjeros documentados. 'Contra estos últimos llevan un acoso diferente por carecer de carné de conducir homologado en España. Muchos inmigrantes no pueden canjear sus permisos de conducción, pero necesitan ir en coche para trabajar en cortijos alejados, por lo que el problema se ha ido generalizando', expuso Hamza.

Un grupo de 25 inmigrantes, en su mayoría subsaharianos, que se encontraban en situación irregular en España, fueron detenidos la tarde del miércoles pasado por la Guardia Civil y la Policía Local de San Isidro, en el término municipal de Níjar. Los detenidos, todos hombres mayores de edad, estaban concentrados en la plaza del pequeño anejo nijareño y, tras el control efectuado por la Guardia Civil, fueron trasladados a comisaría, donde se les incoaron expedientes de expulsión.

La mayoría de los detenidos proceden de Mali, Senegal, Ghana y Sierra Leona; sólo dos son marroquíes. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno señalan que el control efectuado se produjo tras la localización, por parte de la Guardia Civil, de numerosos subsaharianos que se hallaban concentradas en la plaza del anejo nijareño. Las detenciones se iniciaron tras comprobarse que 'ninguno de ellos' tenía papeles.