Soy un irresponsable

He leído recientemente unas declaraciones de la señora ministra de Sanidad, Ana Pastor, en las que califica de 'irresponsables' a los que defiendan la investigación con células madre embrionarias.

Pues bien, tengo que decir que yo soy un irresponsable. Soy un irresponsable porque he estado 15 días encerrado en el Ayuntamiento de Córdoba pidiendo esta investigación, que puede llegar a curar enfermedades incurables hasta ahora, como diabetes, Parkinson, Alzheimer...; soy un irresponsable como los cientos de miles de españoles que han apoyado con su firma estas investigaciones; soy un irresponsable como los más de cincuenta premios Nobel que han solicitado por escrito al señor Bush que se permitan estas investigaciones (¿la señora Pastor tiene ya el Premio Nobel?); soy un irresponsable como la Comisión Nacional de Reproducción Humana Asistida, que ha pedido que se permitan estas investigaciones; soy un irresponsable como los dirigentes de la Unión Europea que dieron más de dos millones de euros al doctor Bernat Soria para que siguiera con sus investigaciones con células madre embrionarias; soy un irresponsable como el señor Blair, que permite que en su país se realicen estas investigaciones. Por todo esto le digo que me siento orgulloso de ser un irresponsable.

La suerte es que en este tema tan delicado sólo tiene derecho a opinar gente que es muy responsable: la Iglesia católica (Gescartera, pederastia, opinión sobre malos tratos a mujeres, despidos injustificados a profesores en los colegios), el señor Bush (pena de muerte indiscriminada, guerra a todo el mundo...), el señor Berlusconi (gran demócrata que va a obligar a poner crucifijos en todos los colegios sin respetar a las demás religiones) y el señor Aznar (creo que no merece comentarios).