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OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Contrataciones ilegales en Marchena

En Marchena se ha desarrollado un Plan de Choque para contratar a personas que estén en paro, a las que el Ayuntamiento ha contratado sin contar con una Comisión de Selección que existe en el Ayuntamiento, formada por sindicatos y partidos políticos. Las 216 personas contratadas lo han sido a dedo por el concejal de Personal, señor Villalobos (del PSOE, en mayoría absoluta). Es decir, cuando se trata de seleccionar a una o dos personas para un puesto de trabajo, es la comisión la que tiene que decir no a un montón de personas, cuando se contratan a 200 es el concejal el que se pone la medalla. Entre estos contratados a dedo está el concejal de IU, saltándose la incompatibilidad legal existente.

Este hecho vulnera algunas de las leyes fundamentales de nuestra democracia, y también las normas que regulan el funcionamiento de esta comisión. La ilegalidad afecta a los trabajadores parados del pueblo que no han sido contratados, a los que legalmente le hubiera podido corresponder, privándoles de un derecho fundamental; a los trabajadores contratados, que al sentirse en deuda con quien les ha hecho el 'favor' no se sentirán libres para poder criticar futuras actuaciones de quienes los ha contratado. No digamos la libertad de actuación del concejal de IU para ejercer la oposición (desde la otra orilla); a la salud democrática del Ayuntamiento, pues si ante un derecho fundamental vulnera la ley, es lógico pensar que la vulnere en otras actuaciones.

Los concejales directamente implicados deben dimitir, y apelo a las direcciones y afiliados de sus partidos para que actúen en este sentido. Mi crítica se extiende al resto de los partidos del Ayuntamiento (PP, PA), por haber permitido esta ilegalidad. Estos hechos provocan en los ciudadanos primero decepción, que se traduce en una abstención en las elecciones, y que pueden ser ilusionados por fascistas disfrazados de salvapatrias, y el ejemplo francés es muy elocuente.

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