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El Gobierno pone en marcha su mayor encuesta para conocer la salud de los vascos

Sanidad preguntará a 5.200 familias por sus hábitos de vida y las enfermedades que padecen

El Departamento de Sanidad pondrá en marcha la próxima semana la mayor encuesta que ha realizado hasta ahora, y una de las principales del Ejecutivo, para conocer el estado de salud de los vascos. Un equipo de 50 profesionales entrevistará hasta final de año a 15.600 personas, pertenecientes a 5.200 familias, un 30% más que la encuesta anterior de 1997. El objetivo es conocer las enfermedades y discapacidades que padece la población, tener datos sobre sus hábitos de vida, como el consumo de alcohol y tabaco, y tener datos precisos del uso que hacen de los servicios sanitarios.

Sanidad dispondrá de los primeros datos en marzo de 2003, y los globales dentro de un año. Aunque el departamento tiene numerosas fuentes de información sobre cómo evoluciona la salud de la población, como el registro del cáncer y el de altas hospitalarias, ninguna aporta los datos que proporciona la encuesta. Sus conclusiones se incorporarán al Plan de Salud 2002-2010, que es el documento que marca las directrices a seguir en el ámbito sanitario en los próximos años.

El consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, presentó ayer los pormenores de la nueva encuesta 2002, a la que calificó de herramienta 'imprescindible' para que los profesionales sanitarios conozcan de primera mano la magnitud de los problemas a los que se enfrentan. El Gobierno realizó su primera encuesta en 1986, la segunda en 1992 y la tercera el año 1997.

Entre las novedades de este año, Inclán resaltó el esfuerzo porque los grupos de población más desfavorecidos, como jóvenes marginales o ancianos discapacitados, estén representados y conozcan lo que les ofrece el sistema para mejorar su calidad de vida. Se trata de colectivos que, debido a su precaria situación o a la falta de información, ni se plantean demandar las prestaciones sanitarias a las que tienen derecho. Además, se han ampliado las preguntas relacionadas con las condiciones sociales que rodean el entorno laboral de los ciudadanos.

La muestra recoge información representativa del conjunto de la población, ya que se selecciona a los encuestados independientemente de que utilicen o no los servicios sanitarios o de que estén o no enfermos. 'Vamos a conocer', indicó el consejero, 'cómo los diferentes problemas de salud, las enfermedades crónicas y la incapacidad repercuten en la calidad de vida de las personas, y cómo percibe y valora cada persona su propia salud. Es una visión de conjunto, que va má s alla de las meras cifras de mortalidad o de incidencia de enfermedades'.

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Los encuestadores acudirán a los hogares de las familias seleccionadas con su acreditación. Previamente a la visita, el departamento enviará a los elegidos una carta solicitándoles su participación y, posteriormente, les llamará por teléfono para concertar la fecha y hora de la entrevista. Su duración ronda los 30 minutos. La participación de la población en otras encuestas ha sido muy alta, como en la de 1997, donde se llegó al 97%.

Inclán ofreció varios datos de la utilidad de este instrumento sanitario. Por ejemplo, la encuesta de 1986 evidenció la alta incidencia de la caries entre la población y la importancia que los ciudadanos concedían a esta cuestión. 'La caries era en ese momento el problema crónico de salud más frecuente de la población', recordó Inclán.

Por ello, en 1989, el departamento implantó un programa de asistencia dental infantil. El año pasado los dentistas concertados con el departamento para llevar a cabo este programa atendieron de forma gratuita a 93.606 niños de entre 7 y 15 años de edad.

La encuesta de salud también ha influido en la atención al cáncer de mama, que en la actualidad constituye la primera causa de muerte prematura entre las mujeres en la comunidad autónoma. Los datos de 1992 reflejaron que sólo el 30% de las que tenían entre 50 y 65 años de edad se había realizado una mamografía en los años anteriores. Estos resultados llevaron al departamento a poner en marcha en 1995 el programa de detección precoz del cáncer de mama. Hasta la fecha, el 80% de las mujeres de entre 50 y 65 años han pasado por él y se les ha realizado, al menos, una mamografía. De esta forma se han podido diagnosticar de manera temprana 1.629 casos, lo que, según el consejero, ha permitido practicar un tratamiento conservador en el 77% de los casos.

Entre otros datos, la última encuesta de salud publicada en 1997 reflejó una disminución del consumo de tabaco por parte de los hombres y un aumento en las mujeres, en relación a la información obtenida en 1992. También se constató un aumento del ejercicio físico por parte de los ciudadanos en su tiempo libre y del número de veces que visitaron al médico. En total, en 1997 se registró una media de siete consultas médicas por persona y año.

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