El rechazo de Batasuna impide a PNV-EA recurrir la Ley de Partidos

El Parlamento vasco rechazó ayer recurrir ante el Tribunal Constitucional la Ley de Partidos, tal y como pretendían los grupos del Gobierno. A la oposicion de PP y PSE, defensores de la ley, se sumó la de Batasuna, que no quiso permitir a PNV, EA e IU lo que considera un doble juego, al cuestionar, por un lado, la ley, pero plegarse, por otro, al cumplimiento de los autos de 'un juez extranjero', en referencia a Garzón.

El debate dejó ver un emplazamiento persistente del portavoz radical hacia el PNV. Otegi, que declaró 'un honor' estar fuera de la legalidad 'española', pedía al PNV coherencia con la definición que Xabier Arzalluz hizo de la situación como de 'estado de excepción'. 'La cuestión es: ¿nos plantamos ante el Estado o no?', preguntó.

La respuesta negativa, explicitada ayer dentro y fuera de la Cámara por portavoces parlamentarios y tres consejeros distintos, abocó la iniciativa al fracaso. La denuncia de doble juego hacia el PNV fue la constante de Otegi.

'No se puede estar repicando y en la procesión', dijo. 'No se puede hablar de involución y de estado de excepción y a la vez cumplir la legislación española', aseguró, tras acusar al partido de Arzalluz de actuar 'como Pilatos'.

Queda ahora la posibilidad de que el recurso lo interponga el Gobierno. El jueves la vicepresidenta, Idoia Zenarruzabeitia, señaló que el Ejecutivo autónomo estudiaría esa posibilidad, pero un portavoz relativizó ayer la afirmación y aseguró que no está ni siquiera decidido si abordar el tema. Fuentes de IU consideran que tal opción, inicialmente defendida por este partido, no tiene sentido tras el pronunciamiento negativo del Parlamento.

El debate tuvo momentos de enfrentamiento crudo entre los portavoces, que se echaron en cara el pasado terrorista de unos o el origen franquista de otros y se dedicaron insultos.. Otegi acusó a los populares de ser 'herederos genéticos y políticos del franquismo' y llamó 'fascista' al portavoz del PP, que en contrapartida le acusó de haber participado en secuestros y de tener compañeros que han matado. El PSE hubo de defenderse del recuerdo del GAL, que sacó a relucir el PNV, mientras el portavoz de éste reivindicó no haber matado a nadie a tiros 'ni cuando la República'.

El PP reprochó al PNV tomar siempre decisiones equivocadas por atender la 'llamada de la sangre' cuando Batasuna está en dificultades. Los socialistas tacharon la iniciativa de 'oportunista', por perseguir 'un puñado de votos de Batasuna'.

El intento de EA de hacer un debate en términos jurídicos, con profusión de citas de sentencias que apoyarían el recurso, fue baldío, e IU hubo de emplearse en desmentir, frente al PSE, que su actuación en Euskadi cree problemas a Gaspar Llamazares.