El Bellas Artes dedica un ciclo al cine de Billy Wilder

La cinemateca del Museo de Bellas Artes de Bilbao ofrecerá a partir de hoy un ciclo dedicado al cineasta Billy Wilder, fallecido el pasado mes de marzo en Los Ángeles a los 95 años. La proyección de Double Indemnity (Perdición; 18.00 horas), en versión original subtitulada en español, y The Lost Weekend (Días sin huella; 20.00), en versión original, abre la programación dedicada al realizador estadounidense, que en una larga y fructífera carrera tocó todos los estilos, desde el género negro hasta obras maestras de la comedia. Hollywood reconoció su talento con la concesión de seis oscars.

El ciclo de películas de Wilder se prolongará hasta el 9 de noviembre, con proyecciones en versión original los jueves, viernes y sábados de cada semana.

Mañana y el 14 de septiembre se repetirán las mismas películas de hoy. Los días 19, 20 y 21 se proyectarán los filmes A Foreign affair (Berlín Occidental) y Sunset Boulevard (El crepúsculo de los dioses); y el 26, 27 y 28 Ace in the Hole (El gran carnaval) y Stalag 17 (Traidor en el infierno).

Las películas elegidas para el mes de octubre son Sabrina, The Seven Year Itch (La tentación vive arriba), Arianne, Witness for the Prosecution (Testigo de cargo), Some Like it Hot (Con faldas y a lo loco), The Apartment (El apartamento), Irma La Douce (Irma la dulce), Kiss me Stupid (Bésame tonto) y The Fortune Cookie (En bandeja de plata).

El ciclo finalizará en noviembre con las películas La vida privada de Sherlock Holmes, The Front Page (Primera Plana), Fedora, y Buddy Buddy (Aquí un amigo).

Nacido en Austria, de origen judío, Wilder se trasladó a Estados Unidos tras el ascenso del nazismo al poder. Varios de sus familiares murieron víctimas del holocausto, tragedia que marcó su vida y que quedó reflejada en el cine tras la Segunda Guerra Mundial en su trabajo como documentalista para las fuerzas estadounidenses destacadas en Europa.

Wilder se inició como periodista en Viena, antes de trasladarse al Berlín de los años veinte, época capital en el desarrollo del cine. Hijo de la cultura europea, siempre se sintió agradecido a EE UU, hasta el punto de que pocos cineastas han sido capaces de trazar un perfil de la sociedad americana como él.

Tras sus inicios como guionista, Wilder llegó a la dirección empujado por su desdén hacia las imposiciones de la industria cinematográfica.Con el tiempo, se convirtió en uno de los maestros indiscutibles de este arte.