China rechaza el "uso de la fuerza o de amenazas" contra Bagdad
China se opone a un ataque de EE UU sobre Irak. Así lo ha indicado su ministro de Asuntos Exteriores, Tang Jiaxuan, quien el pasado martes se entrevistó en Pekín con su homólogo iraquí, Naji Sabri. Tang aseguró que 'el uso de la fuerza o de amenazas no ayudará a resolver el problema en Irak e incrementará la tensión e inestabilidad de la región'. Pero el dirigente chino dio también una de arena: el país que lidera Sadam Husein deberá 'implementar en su totalidad y de forma efectiva las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU , cooperar con Naciones Unidas y mejorar las relaciones con sus vecinos'.
Tang dijo que China está realizando esfuerzos continuos para que la comunidad internacional levante las sanciones contra Irak, siempre de acuerdo con las resoluciones del Consejo. El ministro de Exteriores aseguró que 'la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Irak deben ser respetadas'. Una frase cristalina sobre la posición de su Gobierno ante cualquier tipo de ataque por parte de EE UU.
El revés chino a la estrategia del presidente estadounidense, George W. Bush, se produce la misma semana en la que Pekín aprobó una extensa normativa para reforzar el control de las exportaciones de misiles, una medida que EE UU reclamaba desde hacía tiempo para evitar que armas de destrucción masiva lleguen a países enemigos.
[India, miembro fundador del Movimiento de Países No Alineados, aseguró ayer que también se opone firmemente a una acción contra Irak, informa Reuters. 'Tenemos muy claro que no debería haber una acción armada contra ningún país, y más cuando existe el propósito reconocido de derrocar un régimen', aseguró el ministro de Exteriores indio, Yashwant Sinha.]
