Tiempo de otoño por San Lorenzo
El día más caluroso del año registró ayer descensos de hasta seis grados en la temperatura
Por raro que venga el tiempo, en San Lorenzo, tal día como ayer, el calor se agarra al calendario y se alcanzan máximas de agobio. Pero precisamente ayer fue una excepción, o al menos así se vivió. De madrugada, hubo inundaciones en Alcoy, los últimos coletazos del granizo que amenaza la cosecha de vid de Utiel y Requena volvieron a dejarse sentir golpeando la uva con piedras de hielo de entre tres y cinco centímetros, rayos y truenos de Cullera a San Juan, chaparrón en Sagunto con más de una docena de achiques en bajos, garajes y locales comerciales... 'Valores otoñales en las comarcas del interior de Castellón y Valencia, moderado descenso de las temperaturas, vientos, precipitaciones débiles, granizadas locales', esa predicción abrió el día de San Lorenzo y, según el Instituto Nacional de Meteorología (INM), es válida para hoy, aunque se notará una mejoría lenta y progresiva con ligero aumento de las temperaturas mínimas y máximas.
Tiempo de otoño por San Lorenzo, onomástica en recuerdo de uno de los siete diáconos de Roma encargado de entregar la ayuda a los pobres y que fue quemado en la parrilla por orden del emperador en el año 257 después de que repartiera los bienes de la Iglesia entre los pobres tras el asesinato a manos de los plebeyos del papa Sixto a quien servía. Mínimas de 14 grados en Requena, 17 en Vinaròs o 18 en Alcoy y Castellón son más propias de octubre que de las temperaturas que hace escasos días superaron con mucho los 20 grados de mínima en esos mismos municipios. La diferencia, según fuentes del Centro Meteorológico de Valencia, está entre los tres y los seis grados a la baja respecto a la temperatura registrada, por ejemplo, el pasado jueves. La sensación de que el tiempo está loco aumenta con las imágenes de importantes precipitaciones de agua y viento en Cataluña y en Baleares -incluso la nieve hizo ayer acto de presencia por encima de la cota de los 2.000 metros en los Pirineos.
Pero algunos expertos, como el profesor Francisco Bartolomé Pina, adscrito al departamento de Ciencias de la Tierra y el Medioambiente de la Universidad de Alicante, aseguran que nada de raro tiene este verano. 'Digamos que es especialmente movido pero no tiene nada de extraordinario. Son muchos los meses de agosto en los que se han perdido cosechas, muchos los que condensan precipitaciones importantes, incluidas las de granizo. Tenemos, parece, un proceso de borrascas, con pequeñas gotas frías, y menos calor que en otros meses de agosto. Pero eso no es raro'.
La explicación del profesor Bartolomé Pina, se ve además reforzada por los históricos que recogen que en 1997 hubo inundaciones en Cuenca, también un día de San Lorenzo, con siete personas heridas a consecuencia del temporal. Dos años antes, en 1995, la tromba de agua caída en una zona de Guadalajara provocó las inundaciones en el municipio de Yebra con ocho víctimas mortales. 'Sólo cuando es noticia, cuando nos afecta por algo, nos acordamos, nuestra memoria sobre la meteorología es muy corta', afirmó ayer el físico de guardia en el Centro Meteorológico, quien se remontó incluso al siglo de oro español para recordar que desde entonces no se ha vuelto a producir un agosto tan frío como el que pasó a la historia como pequeña edad de hielo.
'La meteorología, como no tiene patrón, no tiene excepción. Nos parece que este año graniza mucho, llueve mucho... No es así, hace menos calor pero es normal y nada tiene que ver con el cambio climático, el calentamiento de la tierra o el Niño', asegura Bartolomé Pina. Los datos del Centro Meteorológico así lo confirman: 'La media de precipitaciones registradas hoy en la Comunidad no alcanza los diez litros por metro cuadrado'. No es un San Lorenzo tan raro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.