Schröder y Chirac refuerzan la unidad franco-alemana en Europa

Gane o pierda el canciller Gerhard Schröder las elecciones alemanas del 22 de septiembre, los gobiernos de Francia y Alemania seguirán trabajando juntos por una Europa común. Así lo confirmaron ayer el canciller alemán y el presidente francés, Jacques Chirac, en la ciudad de Schwerin, al norte de Alemania, donde se celebró uno de los acostumbrados encuentros semestrales, desde hace ya 40 años, entre ambos Estados.

'No podrá haber una Europa unida si no hay unidad entre Alemania y Francia', afirmó Chirac. 'El proceso de ampliación de la UE sólo puede tener éxito cuando estemos de acuerdo y superemos las diferencias de forma constructiva', recalcó ayer el canciller alemán al término de la reunión. Schröder destacó el buen estado de las relaciones franco-alemanas, pero añadió que se necesita aún mucho esfuerzo para cerrar algunos aspectos básicos en el marco de la UE. Sobre las opiniones enfrentadas de ambos países en política agraria -Alemania quiere reformas en las subvenciones agrarias antes de 2006; Francia, no- afirmó Schröder: 'Tenemos que llegar a la cumbre europea de diciembre en Copenhague con una posición común'.

Para lograrlo, ambos políticos anunciaron que han cerrado una apretada agenda a desarrollar en los próximos cuatro meses. Habrá reuniones informales cada mes y se crearán diferentes grupos de trabajo. La primera cita entre jefes de Gobierno y ministros de Asuntos Exteriores respectivos se podría celebrar, incluso, a finales de agosto, antes de las elecciones alemanas. 'Sólo desde una profunda relación amistosa se puede llegar a compromisos razonables', concluyó Schröder.

La ampliación de la Unión Europea y las diferencias en su seno eran sólo dos de los aspectos importantes de la reunión, que incluían también la política económica y de defensa común, las relaciones con EE UU, la situación en Oriente Próximo y Afganistán, y la lucha contra el terrorismo. Tras las consultas se firmaron varios convenios de colaboración.