El sector duro del régimen iraní acusa a los reformistas de favorecer una ofensiva militar de EE UU

Un día después de ser acusados de allanar el terreno a una invasión militar estadounidense con sus políticas reformistas, los partidarios del presidente iraní, Mohamed Jatamí, pidieron ayer al Parlamento que tome cartas en el asunto y frene la ofensiva lanzada contra ellos por los Guardias Revolucionarios. En un comunicado difundido el domingo, ese poderoso cuerpo militar, ligado a los sectores más reaccionarios del régimen islámico, sostiene que los reformistas están llevando al país por el camino del laicismo y preconizando la separación entre Iglesia y Estado, algo prohibido por la ley.

Los parlamentarios reformistas consideran que la declaración de los Guardias Revolucionarios constituye una interferencia inaceptable en la vida política. 'Creemos que publicar un comunicado en el que se abordan cuestiones políticas y económicas no forma parte de sus atribuciones y es ilegal', declaró el diputado Rajabali Mazrui, destacado líder de los reformistas, al periódico Mardomsalari. Noventa diputados han pedido al ministro de Defensa, Ali Shamjani, que comparezca en el Parlamento para dar explicaciones sobre el comunicado, en el que también se acusa a los reformistas de tratar de debilitar a los líderes islámicos.

El ataque frontal de los Guardias Revolucionarios es un nuevo ejemplo de la profunda división entre conservadores y reformistas en Irán. Los Guardias Islámicos son un grupo militar de élite encargado de proteger al líder supremo de Irán, ayatolá Alí Jamenei, cabeza visible del sector más conservador del régimen.

En su comunicado, los militares afirman estar dispuestos a defender la Revolución Islámica contra lo que llaman invasores extranjeros y sus aliados internos. Sin nombrarlos, acusan a los reformistas de Jatami de abandonar los principios de la revolución islámica y de tratar de convertir a Irán en un estado laico. Según los guardias, ello anima al gran enemigo de Irán, Estados Unidos, a concebir una invasión militar del país.

El pasado sábado, Jamenei hizo un llamamiento a la unidad de las distintas facciones políticas ante los duros ataques verbales de Estados Unidos, que acusa a Irán de formar parte de un eje del mal que patrocina el terrorismo.