El PP introducirá el problema del terrorismo aunque los socialistas traten de minimizarlo

El Partido Popular tiene bien clara una cosa desde hace varias semanas: en el debate de sobre el estado de la nación que se celebrará mañana hablará sobre terrorismo. 'Si el PSOE pretende pasar de puntillas sobre el principal problema del país, nosotros no lo vamos a hacer', indicó a este periódico el portavoz parlamentario del PP, Luis de Grandes.

El PP ha preparado su debate contando con que el PSOE intentará atacar a José María Aznar en cuestiones como la supuesta arrogancia y prepotencia del presidente. Y por eso se centrará en los puntos de encuentro, como son la Ley de Partidos o la batería de acuerdos alcanzados con los sindicatos en los últimos seis años.

'La primera parte del debate será, como siempre, un discurso del presidente del Gobierno en el que dibujará un panorama de la situación general. Ese discurso siempre suele ser, necesariamente, la parte menos dinámica, la más aburrida. Pero luego le corresponde al líder de la oposición plantear alternativas, y me temo que tiene muy pocas', añade De Grandes.

En cuanto al turno de réplicas, el PP confía en la 'capacidad dialéctica' de Aznar para rebatir a José Luis Rodríguez Zapatero. 'Está claro', señala Luis de Grandes, 'que la estrategia de Zapatero este año va a ser llevar un discurso prefijado para sus réplicas, independientemente de lo que diga Aznar. Ése es un método retórico muy antiguo y no le dará resultados. 'La gente se dará cuenta de que Zapatero no tiene ni proyectos ni alternativas', señaló el portavoz del PP.

De Grandes, al analizar el debate de mañana, utilizó con frecuencia términos pugilísticos. 'Zapatero me recuerda a uno de esos púgiles con poca pegada que se pone en manos de un representante muy agresivo que lo asesora mal. Ese representante parece que es José Blanco [secretario de Organización del partido], y lo está haciendo mal.

Zapatero se quejó a sus colaboradores cercanos de los gritos, insultos e improperios que había tenido que aguantar por parte de los diputados del PP durante su discurso del año pasado. ¿Ocurrirá lo mismo este año? 'Nosotros no tenemos la intención de crispar el debate', señala De Grandes, 'pero el PSOE tiene que saber que no posee el monopolio de las descalificaciones'.

El portavoz parlamentario del PP cree que la reciente reforma del Gobierno ha estropeado la estrategia del PSOE de presentar un panorama catastrofista de España y al presidente del Gobierno como un político que ha estado más interesado en la presidencia española de la cumbre europea que de la política interna del país. De Grandes asegura que Aznar se reserva para el debate el anuncio de nuevos planes de futuro. 'Habrá sorpresas, pero no podemos desvelarlas', sentenció.

Respecto al decretazo (numerosos parlamentarios del PP utilizan este mismo término, igual que la oposición y los sindicatos, para referirse al decreto de la reforma laboral), el PP sostendrá lo que ha venido declarando hasta ahora: que está dispuesto a hablar sin cortapisas de la reforma, pero dentro de la tramitación parlamentaria de la ley. Y punto.