Vendedora de libros

En agosto pasado nos visitó una vendedora de libros de la academia de inglés por correspondencia Homenglish, que consiguió, tras varias visitas (que no habíamos solicitado), la venta de un curso de Inglés para mi hijo (entonces de 12 años) en la astronómica, hoy por hoy y para mí, cifra de 570.000 pesetas. Después de la segunda lección (progress-check) quisimos desistir de que nuestro hijo siguiera estudiando inglés en esa academia, pero ahora nos encontramos con la sorpresa que solo disponíamos de siete días para devolver el material del curso, que es lo que marca la ley para estos tipos de contratos.

Aunque dicho material está embalado en sus cajas, hemos de seguir pagando hasta la última peseta ya que si nos olvidamos de este compromiso de pago no dudarán en reclamarnos judicialmente la deuda total que ahora mismo, después de haber abonado unas 90.000 pesetas, está en 2.985,93 euros. Lo que quiero poner en conocimiento de los lectores de ese periódico ya que, aunque parezca de otra civilización, es triste que hoy por hoy estos tipos de cláusulas (¿ ?) estén permitidas a estas academias. Una vez pasados los siete días, tienen asegurada una cantidad de dinero muy, pero que muy respetable. En mi caso, 570.000 pesetas.