La Unió de Periodistes reflexiona sobre la violencia doméstica

Una 'reflexión autocrítica'. Esta es la expresión que eligió ayer la presidenta de la Unió de Periodistes, Rosa Solbes, para referirse al Manual per a periodistes sobre la violència domèstica que ha elaborado esta asociación de profesionales de la prensa, en el que colabora la Consejería de Bienestar Social. El texto aborda el papel de los medios a la hora de informar sobre los malos tratos y recomendaciones como huir de los tópicos, no criminalizar a las víctimas y crear opinión en contra de estos hechos.

Las recomendaciones se exponen de forma explícita en un decálogo que plantea la necesidad de que los periodistas sitúen la violencia doméstica en el marco de los derechos humanos y aboga por 'no caer en estereotipos, prejuicios y tópicos' al tratar estos casos. Apuesta también por por investigar lo que no se ve y 'distinguir claramente entre víctima y agresor', además de abogar por que los medios creen opinión e influyan en la sociedad para que rechace la violencia de género y el sensacionalismo en el tratamiento de estas informaciones. Otros de los aspectos que destaca que los medios intenten reflejar 'la complejidad de la realidad de este problema','no conformarse sólo con las fuentes informativas policiales' y dar también información útil para las víctimas.

Rosa Solbes insistió en la responsabilidad de los medios para hacer frente a la violencia doméstica. 'Es importante informar pero también cómo hacerlo', dijo. De un lado subrayó su papel para 'hacer ver a la sociedad que esas agresiones no son normales', aunque siempre dentro de los cauces del tratamiento adecuado. Este tipo de violencia es 'un filón informativo, por lo que puede causar saturación en el espectador y se puede caer en el morbo'. Emilia Bolinches, responsable de la comisión de la mujer de la Unió, apostó además por que los medios de comunciación 'superen la neutralidad informativa y se pongan del lado de la víctima'.

A la presentación acudió la directora general de la Dona, Clara Abellán, y el consejero de Bienestar Social, Rafael Blasco, que destacó que a lo largo de año ya han muerto cuatro mujeres víctimas de estas agresiones y que la red asistencial de la consejería ha atendido a 1.002 mujeres en este plazo.