Un juez castiga a dos adolescentes que esperan hijos a recibir un curso de paternidad de 50 horas

El Juzgado de Menores de Granada ha castigado a recibir un curso de 50 horas sobre paternidad a dos adolescentes -un chico de 18 años y una chica de 17, que próximamente serán padres con sus respectivas parejas- tras ser declarados autores de una falta contra el orden público. El juez ha considerado que esta pena es trabajo en beneficio de la comunidad.

Los dos menores, que son primos y viven en un ambiente marginal en el barrio de Cartuja de Granada, fueron interceptados en marzo por la Policía Local durante un control cuando circulaban en un ciclomotor en malas condiciones. Lejos de atender a los requerimientos de los agentes, los adolescentes les dirigieron insultos y amenazas, señala sentencia.

Según fuentes judiciales, el castigo se decidió cuando en el transcurso del juicio por ese incidente los menores informaron al tribunal de que ambos van ser en breve, por lo que el juez Emilio Calatayud, con la propuesta de la fiscalía y la conformidad de los acusados, les ordenó prepararse para ello. La sentencia establece que el curso de formación para la paternidad dure 50 horas y sea impartido por una asociación o entidad pública especializada, bajo el control del juzgado.

La orientación del castigo se ha basado en los informes sobre la situación sociocultural de los acusados, que señalan que el chico, que ya había tenido problemas con la justicia de menores, tiene 11 hermanos, su madre se dedica a la mendicidad y las posibilidades de promoción social del chico son muy escasas. La chica carece de patrones educativos y no realiza actividades escolares o laborales. Para la elección de este tipo de medidas, el juez del caso recuerda la conveniencia de atender 'de modo flexible, no sólo la prueba y valoración jurídica de los hechos, sino especialmente la edad, las circunstancias familiares y sociales, la personalidad y el interés' de los acusados.

La sentencia recuerda que el castigo a un curso de paternidad podrá 'en cualquier momento' quedar sin efecto, reducir su duración o cambiarse por otro 'siempre que la modificación redunde en el interés del menor'.