Acierto del Supremo

Al declarar la inconstitucionalidad de (...) las ejecuciones de discapacitados mentales, el Tribunal Supremo pone en marcha una saludable medida, aunque sea limitada, de decencia humana en la utilización de la pena de muerte en el país. La votación, decidida por 6 a favor contra 3, representó un cambio de posición de un tribunal que capituló hace 13 años ante una oleada de sentimientos pro pena de muerte y no encontró razones para prohibir la ejecución de estas personas. Al hacer lo que hizo entonces, cerró los ojos ante lo obvio -que condenar a la pena de muerte a personas con cocientes intelectuales inferiores a 70-, que poco comprenden su culpabilidad moral, viola los patrones de justicia de la civilización. Esta vez, el tribunal ha descubierto 'un consenso nacional' contra las ejecuciones de discapacitados mentales que no fue capaz de encontrar en 1989. (...)

En una época en la que las pruebas de ADN han mostrado cómo un condenado tras otro del corredor de la muerte eran inocentes de los delitos por los que fueron sentenciados, las encuestas demuestran un descenso continuado del entusiasmo de la gente por la pena capital (...). Docenas de convictos, la mayoría sin casi comprender las implicaciones morales de sus actos, han muerto aquí desde 1976. Se cree que en los 20 estados que tienen leyes que permiten la ejecución de discapacitados mentales pudiera haber centenares de condenados cuyos cocientes intelectuales pueden permitirles acceder a una conmutación por cadena perpetua. (...)

Nueva York, 21 de junio