El paro sólo tuvo seguimiento en la zona noroeste de Navarra

La repercusión de la jornada de huelga general convocada por ELA y LAB fue minoritaria en el conjunto de Navarra y sólo tuvo un seguimiento importante en el valle de la Barranca (el corredor que une Alsasua e Irurtzun) y en la zona norte de la comunidad, donde tienen mayor fuerza los dos sindicatos nacionalistas. La detención de siete jóvenes por pinchar las ruedas de dos autobuses urbanos en Pamplona y la carga de la Policía Nacional contra un grupo de personas que lanzó piedras y coreó gritos de 'policía asesina' tras la manifestación convocada al mediodía por LAB en la capital navarra fueron los incidentes más destacados de una jornada que discurrió con tranquilidad.

Los resultados de la huelga se invirtieron en la Comunidad Foral respecto a Euskadi, ya que en Navarra UGT y Comisiones mantienen una clara hegemonía sindical, mientras que ELA y LAB apenas rebasan el 30% de representación. No obstante, los sindicatos se mostraron satisfechos con la respuesta obtenida y destacaron sobre todo las cifras logradas en la Barranca y las zonas industriales de Leiza y Bidasoa, donde el paro fue casi total, según los convocantes, mientras que la Delegación del Gobierno en Navarra lo rebajó al 80%. En el resto de las zonas y sectores, tuvo un impacto muy reducido, que la patronal navarra y la Delegación del Gobierno cifraron en un 5%, por lo que valoraron la huelga como 'un fracaso'. En el turno de mañana de Volkswagen, la principal empresa de la comunidad con 6.000 trabajadores, paró el 12%, según la dirección, mientras que en la administración no acudió a su puesto el 14% de la plantilla del Ayuntamiento de Pamplona y el 7,4% de los 16.751 funcionarios dependientes del Gobierno navarro.

La incidencia en el comercio y los transportes públicos fue mínima excepto en las zonas apuntadas del noroeste y se cumplieron en su totalidad los servicios mínimos del 25% fijados. Aun así, se suspendieron cinco vuelos en el aeropuerto de Noáin (tres a Madrid y dos a Barcelona), que afectaron a 750 viajeros.

Las calles de la capital navarra presentaban una actividad normal. Algunos establecimientos bajaron sus persianas al paso de las manifestaciones realizadas por ELA y LAB, pero volvieron a abrir seguidamente. El término de la marcha celebrada al mediodía por LAB -en la que participaron 2.500 personas, según la Guardia Municipal, y el doble según los convocantes- un sector de los manifestantes comenzó a insultar y provocar a los agentes de la Policía Nacional, lo que motivó una carga policial y enfrentamientos y carreras por la parte vieja de la ciudad.