_
_
_
_
_

Una ciudad de puertas cerradas

La sensación de anormalidad del 20-J se percibirá en transportes, bancos, colegios y hospitales

Lucía Abellán

Pocas son las cosas que van a funcionar con normalidad mañana. Desde el gesto cotidiano de encender la radio al despertar, cualquier ciudadano notará que sus hábitos diarios se van a ver modificados por la huelga general. Las cadenas de radio emitirán programación, pero en gran parte versará sobre la jornada de paro. En televisión, la sensación de anormalidad será mayor, ya que desde las cero horas del jueves las cadenas públicas nacionales han cambiado su programación habitual para centrarla en dos bloques: películas en TVE-1 y documentales en La 2.

Una vez informada de lo que ocurre en las calles, la pareja que decida salir para dejar a sus hijos en el colegio afrontará multitud de dificultades. Salvo en Sevilla, donde el final de curso se ha adelantado a hoy, en principio se trata de una jornada normal. Pero en la mayoría de los centros sólo habrá dos o tres personas (el director, el jefe de estudios y algún otro trabajador) y, por lo general, la fiesta de fin de curso, que se suele celebrar el 20 de junio, se ha adelantado o atrasado.

Cuestión diferente será llegar al colegio, o a cualquier otro destino, si se pretende hacer en transporte público. Para los desplazamientos urbanos, los sindicatos sólo garantizan el cumplimiento de 25% del servicio en las horas punta (entre 6.00 y 9.00 y de 18.00 a 21.00), tanto en cercanías como en los metros y en los autobuses urbanos. Salvo en Cataluña, donde se ha llegado a un acuerdo con la Generalitat, el resto de España ha fijado unos servicios por encima de este porcentaje, pero las centrales no aseguran su cumplimiento.

Por motivos laborales o personales, y en caso de que haya conseguido colocar a sus hijos en el colegio, esa pareja puede tener la intención de tomar un puente aéreo entre Madrid y Barcelona. Estos vuelos, que circulan aproximadamente cada hora y en horas punta, cada treinta minutos, se verán reducidos hasta el 20% que fijó el Ministerio de Fomento. Pero es que los sindicatos consideran abusivo el servicio y proponen que no se cumpla, con lo que es posible que no salga ninguna de las 25 o 30 conexiones diarias que realiza Iberia.

Si el transporte público no permite los desplazamientos y la pareja decide utilizar su automóvil, deberá tener en cuenta que repostar gasolina será más difícil que otros días. De las alrededor de 8.000 estaciones de servicio que hay en España, alrededor de un 20% forma parte de los servicios mínimos decretados por el Gobierno. La lista de gasolineras abiertas se publicó el pasado sábado, día 15, en el Boletín Oficial del Estado, pero los sindicatos advierten de que 'están muy mal repartidas'.

No obstante, pocas de estas actividades se podrán realizar sin dinero. Los sindicatos calculan que la mayor parte de las oficinas bancarias optará por no abrir ya que, si no cuenta con el personal suficiente, renunciará a recibir al público sin la seguridad necesaria. En los cajeros automáticos también pueden surgir problemas, ya que, normalmente, se abastecen al final de la jornada. A última hora de hoy habrá abastecimiento, pero no mañana, por lo que al término del día puede producirse escasez.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Si cuenta con dinero o con una tarjeta bancaria, la pareja podrá ir al supermercado. Anged, la patronal de grandes superficies que aglutina a cadenas como El Corte Inglés o Carrefour, manifiesta su voluntad de abrir los centros. La representación sindical de este sector se centra en dos organizaciones que no apoyan la huelga, pero, en este caso, y en el de los autónomos que regenten un comercio, los piquetes informativos pueden disuadir la apertura.

Si, como colofón del día, la pareja decide tomar un taxi para realizarse una revisión médica en un ambulatorio, en primer lugar debería renunciar a la revisión. Los centros médicos funcionarán con el personal de los festivos y atenderán fundamentalmente las urgencias. Pero, además, lo más probable es que tenga dificultades en encontrar un taxi. Aunque las asociaciones que representan a la mayoría de este sector -compuesto casi en su totalidad por autó-nomos- no se han adherido a la huelga, sí lo harán los asalariados, afiliados mayoritariamente a UGT y CC OO, y que suelen trabajar en el turno de tarde-noche.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lucía Abellán
La redactora jefa de Internacional de EL PAÍS ha desarrollado casi toda su carrera profesional en este diario. Comenzó en 1999 en la sección de Economía, donde se especializó en mercado laboral y fiscalidad. Entre 2012 y 2018 fue corresponsal en Bruselas y posteriormente corresponsal diplomática adscrita a la sección de España.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_