Las grandes empresas venden participaciones en otras sociedades para salvar sus resultados
Las compañías del Ibex obtuvieron 4.443 millones de beneficios en el primer trimestre
Es el momento de hacer caja. Las grandes compañías han anunciado ya varias desinversiones para atender los descalabros provocados por sus inversiones en Argentina. Una estrategia que comenzó en el primer trimestre del año, donde sólo gracias a estas operaciones el conjunto de compañías que conforman el Ibex 35 pudieron anotarse un beneficio de 4.443,5 millones de euros, el 5,4% más que en 2001. La venta del 23% de Gas Natural en manos de Repsol o la salida del SCH de Dragados son una muestra del proceso desinversor, que está provocando fuertes movimientos en Bolsa.
El anodino comportamiento de la Bolsa en el año contrasta con la intensa actividad que se está produciendo en el mundo empresarial. Ventas, fusiones y colocaciones surgen todas las semanas como una nueva estrategia de los grandes grupos empresariales, que quieren hacer caja y seguir ofreciendo unos sólidos beneficios. Esta práctica es la que ha permitido cerrar a las empresas del Ibex 35 el primer trimestre del año con un crecimiento en las ganancias del 5,4%, en relación con las obtenidos en 2001. Y eso después de que Argentina haya tenido una repercusión negativa de mil millones en los beneficios de estas compañías y de unos 3.000 millones en sus fondos propios.
Para compensar estos descalabros, la venta de firmas participadas ha sido determinante. En el primer trimestre, la venta de la eléctrica Viesgo a Enel por parte de Endesa colocó a la eléctrica a la cabeza en el beneficio empresarial del primer trimestre, con 767 millones de euros. También la constructora Ferrovial se desprendió del 40% de Cintra y consiguió multiplicar por cuatro su resultado neto. NH Hoteles se desprendía de 5 hoteles que pasaban a formar parte del patrimonio del dueño de Inditex, Amancio Ortega. Ya fuera del Ibex, Aguas de Barcelona logró un extraordinario interesante al vender su participación en Adeslas.
Este proceso desinversor continúa. El Santander Central Hispano está en el centro de todas las miradas. Por sorpresa se desprendió de su participación de control en Dragados por un importe de 900 millones de euros, que ha pagado el competidor constructor ACS. Dicha venta ha dado lugar a la especulación de que el banco venderá sus acciones en Vallehermoso (25,52% del capital), así como que su socio en Cepsa TotalFina aumentará su participación mediante la compra de títulos al SCH, que posee el 33,34% del capital de la petrolera. Posibles negociaciones que han supuesto importantes subidas en estas compañías a la espera de que los futuros compradores estén dispuestos a pagar un precio superior al de mercado, ya que estas participaciones permiten cambiar la composición del consejo de administración.
También el SCH decidía dar marcha atrás en la oferta pública de adquisición de acciones (OPA) de exclusión presentada sobre su filial Banesto. El banco anunció la posibilidad de realizar una oferta de hasta el 10% de la entidad presidida por Ana Patricia Botín con el fin de dotar de liquidez al valor en Bolsa. Una operación que además supondría un ingreso extraordinario de dinero para el SCH. Previamente se deshizo de su posición en Société Générale y redujo su participación en Commerzbank. Por su parte, el BBVA no ha realizado todavía ninguna operación de desinversión. Los problemas internos de la entidad pueden explicar esta mayor tranquilidad en las ventas, mientras conseguía sin extraordinarios aumentar un 6% su beneficio en el primer trimestre del año.
Telefónica salva sus cuentas
Si Telefónica salvaba parcialmente su primer trimestre tirando de créditos fiscales, ahora en la Bolsa se especula con importantes desinversiones en su filial de medios de comunicación, Admira. Con la estrategia de poner freno a las pérdidas, Telefónica decidía fusionar su plataforma televisiva Vía Digital con Sogecable. Además, quiere reducir al mínimo su presencia en medios de comunicación en Argentina. Unos movimientos que el mercado valora como la retirada ordenada de Telefónica del sector audiovisual, donde su participación en Antena 3 TV es la más significativa (47,5% del capital).
La petrolera Repsol-YPF, a mediados de este mes de mayo, anunció la venta del 23% del capital de Gas Natural entre inversores institucionales. Una operación que generará a Repsol una pluvalía neta de impuestos de 1.060 millones de euros. Tras esta venta, la petrolera controlará todavía el 24,04% de la compañía gasística.
