Un estratega en las cajas

Juan Ramón Quintás Seoane (A Coruña, 1943) no ha llegado a la presidencia de las cajas de ahorro en un momento tranquilo. Manuel Pizarro, presidente saliente, y él mismo planificaron el relevo para dentro de un año. Sin embargo, la llegada de Pizarro a la presidencia de Endesa en un momento difícil para el sector eléctrico ha provocado que se traspasen anticipadamente los papeles. Pizarro también es presidente de Ibercaja y vicepresidente de la Sociedad de Bolsas.

Curiosamente, la primera vez que se elige a un presidente de la Confederación de Cajas de Ahorros (CECA) ajeno a la arena política -Quintás es un técnico que ocupaba el puesto de director general desde 1994- recibe un encargo netamente político. Sobre la mesa de Quintás está el borrador de la Ley Financiera, su primera y más importante tarea. Ha llegado el momento de lidiar con los grandes partidos y las grandes cajas para sacar adelante una ley que, hasta ahora, ha sembrado la polémica en el sector. 'Creo que la crispación se ha producido por los aspectos menos relevantes de la reforma (la edad límite de los presidente y la duración de los cargos), y espero que pronto vuelvan las aguas a su cauce', comenta el presidente de la CECA.

Pero Quintás conoce cómo se negocia en el Congreso. Fue diputado por UCD en la primera legislatura de la democracia y portavoz de la comisión de economía. Esta experiencia, junto a su fuerte preparación académica -es doctor en Ciencias Económicas y catedrático de Teoría Económica desde 1971-, ha hecho que sea elegido por unanimidad para su cargo, tras una cerrada ovación del Consejo de la CECA del 22 de mayo.

Quintás es consciente del apoyo fundamental de Pizarro para alcanzar este puesto, 'pero eso no hace que que me sienta tutelado'. Pizarro continuará sentado en el Consejo de CECA, 'y es algo positivo, porque aportará valiosas ideas, ya que es un ejecutivo con excelentes conexiones y uno de los que mejor conocen este sector'.

Pero la llegada al máximo cargo de la CECA no alterará sus costumbre de vida. Como hace desde 1994, cada viernes Quintás seguirá volando hasta su pazo cercana al aeropuerto de A Coruña. 'Me gusta perderme por el monte con mis perros. Es el mejor momento para pensar cómo solucionar los problemas'. Resolver situaciones es una de sus aficiones; se reconoce apasionado por la estrategia, tema del que conserva una importante colección de libros. Sin duda tendrá que hacer uso de los manuales cuando lleguen las tormentas.