CiU sólo negociará los presupuestos de 2003 con el PP porque 'es la única fuerza que ayuda'

Salvo imprevistos, Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular (PP) volverán a aprobar conjuntamente los Presupuestos de la Generalitat. Delegaciones de ambos partidos empezaron ayer a negociar las líneas maestras de las cuentas de 2003, y las dos partes mostraron su convencimiento de que los escollos serán mínimos; una prueba, según la oposición, de que CiU y el PP son 'socios naturales'. El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran, subrayó que sólo negociarán con el PP porque 'a la hora de la verdad, es la única fuerza que se brinda a ayudar'.

Los últimos presupuestos de Jordi Pujol como presidente de la Generalitat tendrán muy probablemente el sello de CiU y del PP. Las dos formaciones iniciaron ayer las negociaciones para aprobar los presupuestos de 2003 sin los sobresaltos del último ejercicio, cuando el consejero de Economía, Francesc Homs, presentó el proyecto de ley de presupuestos sin haberlo pactado con el PP.

En esta ocasión, los contactos han empezado inusualmente pronto, mucho antes de las vacaciones del verano, y no se han iniciado con Homs -que ayer estuvo ausente de la reunión-, sino con un encuentro de las direcciones de los dos partidos, una petición clásica de los conservadores, que tratan de dar el máximo realce político a la negociación de los presupuestos. La delegación de CiU estuvo encabezada por su secretario general, Josep Antoni Duran, y por su futuro candidato y hoy conseller en cap, Artur Mas, mientras que la del PP estuvo dirigida por su presidente regional, Alberto Fernández Díaz.

Tras el encuentro, de una hora de duración, Duran agradeció en varias ocasiones el apoyo que el PP presta a CiU en el Parlament y justificó el interés de la federación nacionalista por pactar los presupuestos con el partido de José María Aznar. 'A la hora de la verdad, es la única fuerza que se brinda a ayudarnos', aseguró el dirigente democristiano, quien descartó abrir negociaciones con el resto de partidos. 'No tiene ningún sentido mantener reuniones bilaterales con quien sabemos que no está dispuesto a aprobar presupuestos', dijo en referencia a los partidos de izquierda, que a su juicio sólo persiguen la 'erosión permanente' del Ejecutivo. Alberto Fernández señaló que la negociación tiene 'buenas perspectivas'.

El Partit dels Socialistes (PSC) e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) coincidieron en calificar las negociaciones de 'escenificación'. 'CiU y el PP simulan el inicio de las negociaciones y así salvar el único obstáculo existente, los presupuestos, para celebrar las elecciones en otoño del próximo año', apuntó el presidente del grupo de ICV, Rafael Ribó, quien dijo que el gesto confirma que ambos partidos son 'socios permanentes de legislatura'.

El portavoz socialista, Joaquim Nadal, consideró que las conversaciones son una nueva prueba de que CiU y el PP son 'socios naturales'. En su opinión, esta alianza para los presupuestos comporta que se tenga que pagar un precio que arroja un 'resultado negativo para Cataluña'.