Urbanismo niega al juez que favoreciese a unos promotores en Arroyo del Fresno

El Ayuntamiento de Madrid asegura que la recalificación de seis parcelas en el polígono de Arroyo del Fresno (Fuencarral), donde se han levantado más de 4.000 pisos en los últimos cinco años, se ajusta 'a la legalidad urbanística' y no ha supuesto ningún 'trato de favor a los promotores' de esas casas 'en detrimento de los intereses municipales'. Ignacio del Río, edil de Urbanismo, y Luis Armada, gerente municipal de esa área, lo indican así en un informe que han remitido al juez Eduardo Claverías, del Juzgado de Instrucción número 36 de Madrid, que lleva el caso.

Este magistrado, que investiga una denuncia por supuestos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y contra la ordenación del territorio, pidió el pasado marzo a Del Río y a Armada que le informasen sobre una cesión y recalificación de seis parcelas en Arroyo del Fresno. Esta operación fue fruto de un convenio que el Ayuntamiento firmó con unos promotores en 1997.

La Fiscalía de Delitos Económicos de Madrid y el PSOE están personados en la investigación, que pretende averiguar si se especula con el suelo público que cede el Consistorio a promotores privados para que hagan casas baratas. La compra-venta de una de aquellas seis parcelas permitió al constructor y ex presidente del Real Madrid Lorenzo Sanz ganar más de un millón de euros en un solo día.

En su contestación al juez, Del Río y Armada sostienen que tanto la cesión a particulares como la conversión en edificables de seis parcelas en Arroyo del Fresno, en 1997, se atuvo a la ley. Y que también fue legal el decreto que el gerente de Urbanismo firmó en 1998 para que los técnicos municipales informasen favorablemente la concesión de las licencias a las casas construidas. Armada firmó un decreto validando la operación ante las dudas iniciales que pusieron los técnicos municipales. Del Río y Armada señalan asimismo al juez que 'las consideraciones desfavorables' emitidas por la Comunidad sobre esta operación resultan contradictorias y sólo reflejan el 'parecer' del Gobierno sobre una actuación que, aun pudiendo hacerlo, no ha impugnado.

Tres informes

La Comunidad elaboró tres informes, entre marzo y mayo de 2000, que revelan que en Arroyo del Fresno no se respetó el planeamiento urbanístico y que el Ayuntamiento debía efectuar modificaciones puntuales en el Plan de Ordenación Urbana para amparar el incremento de edificabilidad.

Las pesquisas sobre este polígono no han hecho más que empezar y, de momento, hay un imputado, Carlos Pinilla. En 1997, en calidad de presidente de la junta de compensación, firmó un convenio con Del Río y Armada mediante el cual el municipio recalificaba seis parcelas, tres de ellas de titularidad municipal, para hacer viviendas. La idea era construir 539 viviendas más de las previstas en el plan general (unas 3.500).

El PSOE ha pedido al juez que cite a Del Río y a Armada para que declaren sobre este asunto. La denuncia indica numerosas irregularidades. Por ejemplo, que el Ayuntamiento, en esa operación, condonó supuestamente plusvalías por un importe superior a seis millones de euros y que la cesión de las parcelas se hizo mediante adjudicación directa y obviando el procedimiento del concurso, en contra del criterio del interventor general del Ayuntamiento.

El convenio suscrito con la junta de compensación para la recalificación de las seis parcelas estipulaba, según la denuncia, que en uno de esos solares se levantasen casas baratas. La denuncia sostiene que hubo especulación con este solar, del modo siguiente: la junta de compensación, con Pinilla a la cabeza, vendió el terreno el 27 de marzo de 1998 por 1,3 millones de euros a una empresa del promotor y ex presidente del Real Madrid Lorenzo Sanz.

El mismo día que Sanz adquirió el solar, lo vendió, a su vez, a una cooperativa gestionada por el propio Pinilla, pero por el doble de precio: casi 2,4 millones de euros; es decir, Sanz ganó con esa operación, en un solo día, más de un millón de euros (180 millones de pesetas). Las otras dos parcelas municipales se las quedaron Pinilla, que construyó en la suya 231 viviendas, y Sanz, que levantó 142 pisos.