La General renuncia por la controversia y la complejidad técnica a convertir un hospital en un gran centro cultural

El proyecto para convertir el hospital de San Juan de Dios, un monumento de comienzos del siglo XVII, en un gran centro museístico y cultural de Granada no ha superado la fase de la polémica. La Caja General de Ahorros de Granada, impulsora de la compleja operación urbanística que llevaba aparejada la remodelación del emblemático edificio, desistió formalmente ayer por problemas de 'carácter legal y contable' y por la falta de entendimiento entre instituciones y partidos. El alcalde de Granada, el socialista José Moratalla, anunció el jueves la retirada del Ayuntamiento de la operación.

El pasado 11 de febrero la Caja General puso en marcha, junto con la Diputación, el Ayuntamiento y las consejerías de Salud y Cultura, un protocolo de intenciones cuyo fin último era la cesión del hospital (que aún tiene uso sanitario) para convertirlo en centro de cultura. Unos días más tarde, la orden de los Hermanos de San Juan de Dios alegó derechos históricos sobre el edificio y exigió que se mantuviera su carácter asistencial.

A partir de ahí se desató una polémica que ha culminado con la renuncia definitiva de los promotores. La Caja General divulgó ayer un comunicado en el que lamenta el 'debilitamiento objetivo del imprescindible consenso institucional' para llevar a término la operación. Estas circunstancias conllevan 'la imposibilidad de desarrollar el proyecto'.

La entidad de ahorros alude también a diferentes problemas burocráticos, como la imposibilidad de que la Diputación, titular del hospital, vendiera directamente la propiedad a cambio del precio equivalente al valor de construcción o las dificultades técnicas que implicaba la cesión gratuita del inmueble. El Ayuntamiento granadino, por su lado, decidió retirarse a causa de la polémica 'innecesaria' generada en la ciudad que ha acabado convirtiéndose en un 'objetivo cainita'. Tanto la Consejería de Salud como la de Cultura y la Diputación han animado en los últimos días a continuar con el proyecto.

La General precisó ayer que su idea era poner en marcha un proyecto 'presidido por el consenso y en el que se aunaran todas las voluntades de las instituciones' algo que a la vista de las reacciones no ha sido posible.