Maragall rechaza la propuesta de pacto municipal del PP

El líder del PSC, Pasqual Maragall, rechazó ayer la oferta del PP de un pacto con todas las fuerzas políticas de izquierda -CiU ya dio un no rotundo a la propuesta popular- para conseguir la descentralización del Gobierno catalán a favor de los entes locales. No es que Maragall considere que el Gobierno central y la Generalitat no tengan que traspasar más competencias -'nosotros somos partidarios no de quitar, sino de dar', aclara-, sino que opina que el PP 'es más centralista, si cabe, que CiU'.

Pasqual Maragall ve poco factible que populares y socialistas se pongan de acuerdo en 'el cómo y el qué', por lo que considera 'difícil que Josep Antoni Duran Lleida lleve a cabo su amenaza de avanzar las elecciones porque el acuerdo [entre el PP y los partidos de izquierda] difícilmente se produciría'. Ahora bien, un avance de las elecciones sería, a juicio de Maragall, algo 'fantástico'. Lo que tiene que hacer Duran Lleida es desarrollar un 'programa de descentralización más atrevido e importante del que está haciendo', manifestó el candidato socialista a la presidencia de la Generalitat.

Maragall no ahorró críticas al PP, un partido 'muy hábil haciendo listas, unas listas larguísimas' de problemas, pero no tan eficaz cuando se trata de dar soluciones. Maragall no perdió la ocasión de criticar el acuerdo al que han llegado populares y convergentes para aplazar la reforma de las incompatibilidades. Esta propuesta obligaría a los altos cargos a declarar sus actividades privadas en los años anteriores a su responsabilidad pública. Y 'después se extrañan porque la gente habla de corrupción, parece que tengan que esconder alguna cosa', se exclamó el líder socialista. Maragall también advirtió que España está 'convulsionada' porque corren tiempos de 'muchas sorpresas'. El motivo de la 'marejada' que se avecina, en palabras de Maragall, es que 'las dos o tres grandes empresas más importantes del país [refiriéndose a Telefónica, Repsol y el BBV] tienen crisis internas o financieras'.

Gobierno cansado

En una entrevista concedida a TV-3, Maragall aseguró: 'Tenemos un Gobierno cansado, que no está para los asuntos que cuentan'. Prueba de ello, agregó, es el escaso papel que tuvo durante la Cumbre de la UE celebrada en Barcelona, y señaló que 'hace 10 años esto no habría pasado'.

No faltaron alusiones a los presuntos casos de corrupción en Cataluña denunciados por la izquierda, que Maragall atribuyó a que 'un gobierno que dura mucho acaba teniendo problemas de este orden porque se oxida; es ley de vida'. Ante esta situación, consideró que 'la oposición no puede quedarse callada', aunque debe limitarse a 'levantar acta', sin convertirlo en el 'tema más importante del país'.